ECONOMíA

Calificación negativa de Fitch para Pemex, advertencia a gobierno entrante: Luis Miguel González

La perspectiva negativa de la deuda de Petróleos Mexicanos (Pemex) por parte de la agencia Fitch Ratings es una advertencia para el gobierno entrante sobre la posibilidad del cese de exportaciones de crudo y los altos costos para la empresa que significaría cambiar su estrategia de negocios hacia la refinación. Así lo consideró Luis Miguel González, director general editorial de “El Economista”, en entrevista con Raymundo Riva Palacio en “Estrictamente Personal”.

De acuerdo con Luis Miguel González, la calificadora estadounidense toma en consideración dudas en la estrategia comercial de Pemex a corto, mediano y largo plazo.  Además, explicó que la calificación también hace referencia al perfil crediticio de la empresa, tomando en cuenta que la empresa debe 104 mil millones de dólares, una deuda que consideró más grande que la deuda completa que tienen algunas naciones. 

Hay países que no tienen una deuda de ese tamaño”, aclaró Luis Miguel González. “Tiene relevancia por el monto de los pasivos de la petrolera. Cualquier movimiento en su tasa de interés, pues obviamente se va a notar mucho dado el volúmen”, adelantó.

González considera como uno de los principales factores para la advertencia de Fitch Ratings la posibilidad del cese de exportaciones de petróleo crudo, el principal negocio de Pemex, ante una nueva estrategia comercial del presidente electo con un enfoque en la refinación, con la que pretende reducir el costo de los combustibles.

No hay ningún negocio que le deje tanto dinero a Pemex como exportar”, dijo Luis Miguel González. “Simbólicamente es muy importante el tema de refinación, sobre todo para el próximo gobierno, pero el negocio de Pemex es exportar petróleo crudo”

La refinación de crudo tiene ahora un valor simbólico, pues el presidente electo Andrés Manuel López Obrador, ha dicho que reactivará las actividades de esta índole en la empresa, con lo cual espera reducir los costos de la gasolina.

Por lo tanto, de acuerdo con el editor de “El Economista”, la nueva calificación de Fitch y su actualización a una perspectiva crediticia negativa es una advertencia para el presidente electo.

Lo que dice Fitch es ‘considerando lo que has hecho, considerando lo que tienes, pues yo creo que si lo haces pues no te va a ir bien’”, aseveró González.

La calificación crediticia de Pemex por parte de Fitch surgió el pasado viernes, días después de que la calificadora Moody’s advirtió sobre riesgos crediticios por la agenda energética propuesta por el presidente electo, pues la construcción de la prometida nueva refinería podría costar “más de 6 mil millones de dólares” con una alta posibilidad de sobrepasar el costo estimado.

La analista principal de Moody’s para Pemex estimó el jueves que la posible nueva refinería estaría lista para operar después de 8 años del inicio de las obras, mientras que un grupo de refinerías existentes se encuentran al 40 por ciento de uso.

Además, la consultora destacó el jueves que un retraso en las subastas de petróleo y gas, iniciadas tras la entrada en vigor de la reforma energética del actual gobierno, podría generar incertidumbre para el apetito de inversionistas extranjeros.

Por parte del gobierno entrante, la futura secretaria de Energía, Rocío Nahle, consideró como “absurdo” el comentario de la calificadora crediticia, mientras que el presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, ha establecido que las calificadoras deben “responsabilizarse” de las afectaciones a los mercados que generan la publicación de sus perspectivas.

Con información de ForoTV

asa.