En el centenario del asesinato del Caudillo del Sur, Emiliano Zapata, este 10 de abril, desde la plaza central de Cuernavaca, Morelos, el Presidente Andrés Manuel López Obrador refrendó el compromiso de su gobierno con los ideales de los héroes de la nación. Con la lealtad de Emiliano Zapata a los campesinos, y al país, por lo que este año fue consagrado al general.
“Un hombre leal a sus ideales, a la justicia. Esa es, considero, la enseñanza mayor de Emiliano Zapata: su lealtad a los principios, su lealtad a los campesinos, su lealtad a la causa de la justicia. Por eso estamos aquí para recordar esa historia y, como aquí se mencionó, además de la reflexión, del análisis del momento actual y del compromiso de llevar a cabo la Cuarta Transformación de la vida pública de México, tener presente esos ideales y hacer el compromiso de no traicionarlos nunca, jamás”, apuntó el mandatario federal.
Ante Lisseth Castro Zapata, bisnieta de Emiliano Zapata; de su gabinete legal y ampliado, así como del gobernador, Cuauhtémoc Blanco, y de su esposa, Beatriz Gutiérrez Müller, el presidente afirmó que en este gobierno no se puede ocupar un cargo sin perseguir un ideal de justicia, sin buscar una transformación.
“Sigamos su ejemplo, de Hidalgo, de Morelos, de Juárez, de Ocampo, de Madero, de Villa, de Emiliano Zapata. Ahí está el plan de gobierno, ahí está el camino a seguir, lo demás no sirve, es politiquería. Sólo los corruptos, los ambiciosos vulgares, buscan los cargos para sacar provecho en lo personal. El servidor público tiene que atender las demandas de justicia y por eso nos da mucho gusto estar aquí, quisimos venir todas y todos los que formamos el gobierno de la República para refrendar nuestro compromiso con la justicia. No le vamos a fallar al pueblo de México, se van a quedar con las ganas los conservadores”, dijo el presidente.
La bisnieta de Zapata, único familiar presente, pidió al gobierno un homenaje en especial.
“Las viudas de los combatientes del Ejército Libertador del Sur, por mi conducto, expresan su deseo de que se les dignifique su pensión mensual. Eso sería un digno homenaje al jefe suriano, al Caudillo del Sur, que dio su vida por mejorar las condiciones de su pueblo y que en el Plan de Ayala se preocupó por proteger a las viudas y huérfanos de la revolución campesina. Emiliano Zapata, nuestro jefe, está vivo y seguirá vigente en la vida pública de nuestro país”, solicitó.
Casi al inicio de su mensaje, el presidente fue interrumpido repetidas veces por un par de jóvenes asistentes que, de pie y a gritos, reclamaron ayuda para atender el conflicto laboral que mantiene en paro a la Universidad de Chapingo.
“Sí, tienen que ponerse de acuerdo, dialogar al interior de las universidades porque son autónomas y tienen que buscar entre ustedes la solución justa y pacífica. Va a haber solución, pero tienen ustedes que participar. Va a haber diálogo ahora mismo, terminando el acto platico con ustedes”, respondió.
Al término del evento en el que hubo música de las bandas de la Marina y de Tlayacapan, y bailables regionales, el Presidente conversó unos minutos con las jóvenes estudiantes de Chapingo.
“Dijo que va a haber un diálogo y que el secretario de la Sader y la secretaria de Gobernación son los que van a solucionar este problema”, apuntó una estudiante.
(Con información de Carmen Jaimes)
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