Si alguna vez has leído relatos de sexo, sabes que las historias eróticas pueden darle vida a las cosas en el ámbito sexual, pueden inspirar a explorar nuevas fantasías e incluso a probar nuevos tipos de juegos sexuales en pareja.
No importa si te ha dado pena leer historias de sexo, te sorprenderías al saber que en realidad son increíblemente populares y muchas veces tienen más ventas que otros libros básicos de ficción.
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Los relatos de sexo también se conocen como ficción erótica o ficción para adultos y son historias escritas sobre el desarrollo de una relación romántica a través de la interacción sexual. En ellas, el sexo es una parte inherente de la historia, el crecimiento del personaje y el desarrollo de la relación, y no se puede eliminar de la historia.
Aunque puede parecernos algo muy cercano, la ficción erótica se diferencia de la pornografía en que en esta, las escenas son escritas con el único propósito de la gratificación sexual, y la trama, el desarrollo del personaje y el romance no son primordiales, mientras que en los relatos de sexo sí.
Si bien el sexo juega un papel clave en la ficción erótica, el sexo en sí es secundario para el desarrollo de los personajes y la trama, y un buen escritor de erótica sabe que, sin importar lo bueno que sea el sexo, debe haber un buena historia sólida, con el fin de mantener el interés del lector.
Si bien este tipo de literatura es muy popular, son las mujeres el público que más lo lee. De hecho, se ha demostrado científicamente que este tipo de relatos aumenta el deseo sexual de las mujeres.
Según un estudio científico del investigador Harold Leitenberg de The Journal of Sex Research, las mujeres que leen novelas románticas o eróticas tienen 74% más sexo con sus parejas que las que no lo hacen, así que leer relatos de sexo es una gran forma de mantener la llama encendida.
