Un perro permaneció a la espera de su dueño, al pie de la cama del hospital donde éste falleció días atrás.
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Moose es un perro labrador de tres años, que permaneció inamovible varios días junto a la cama del hospital en espera de su dueño, sin saber que éste había fallecido.
Al ver que el perro no se retiraba, las enfermeras del lugar contactaron a la ONG Eleven Hour Rescue para que se hicieran cargo del animal.
La historia de Moose, así como una foto de su triste espera, fue compartida por Northstar Pet Rescue, otra ONG con sede en Nueva Jersey.
Moose se sentó pacientemente al lado de la cama de hospital de Dad, esperando que regresara, sin saber que había fallecido. Ahora Moose ha sido acogido por nuestros amigos de Eleventh Hour Rescue y está llevando muy mal la pérdida de Dad. Por favor, ayuda a Moose a encontrar un nuevo hogar y una familia a la que él pueda amar”
… escribieron en la publicación.
Tras este post se han recibido decenas de solicitudes para adoptar a Moose. La organización agradeció el interés y confirmó que el perro labrador ya encontró una familia “maravillosa” que se hará cargo de él.
