Inicio  /  Historias
SALUD

Ducha vaginal: Te hablamos de sus consecuencias

La ducha vaginal no es recomendada por especialistas. Te decimos algunos de sus efectos secundarios.

Aunque las duchas vaginales son una práctica común, tienen consecuencias riesgosas y pueden derivar en varios problemas de salud, como inflamación de la pelvis, irritación o sequedad vaginal, entre otras.

 

Se cree que pueden prevenir o tratar una infección, limpiar la vagina después de la menstruación o las relaciones sexuales y para prevenir el embarazo, sin embargo, hay evidencia científica de que las duchas vaginales en mujeres y adolescentes son dañinas.

Consecuencias de realizar una ducha vaginal

El momento en el que se realizan las duchas vaginales, es decir, el uso temporal de las duchas vaginales en relación con la actividad sexual, el embarazo y el ciclo menstrual, puede afectar las consecuencias. 

 

Durante la ovulación, los niveles de estrógenos circulantes aumentan, el orificio cervical se abre y el moco cervical se vuelve más claro y profuso, por lo tanto, el riesgo de infección ascendente por la presión de las duchas vaginales puede ser mayor en el momento de la ovulación, cuando el orificio cervical se abre y el moco es delgado.

 

Así, las duchas vaginales pueden alterar el entorno natural de la vagina y tener como consecuencia las siguientes complicaciones:

 

Problemas de embarazo

Las mujeres que se hacen duchas vaginales con regularidad tienen más probabilidades de experimentar un parto prematuro, un aborto espontáneo y otras complicaciones del embarazo. El uso de duchas vaginales también puede provocar un embarazo ectópico, y las mujeres que usan duchas vaginales pueden tener dificultades para quedar embarazadas.

 

Infecciones

Si bien algunas mujeres usan duchas vaginales con la esperanza de eliminar una infección vaginal, esto sólo puede empeorarla, además de que también puede propagar la infección a otras partes del sistema reproductivo.

 

Por otra parte, una mujer que se hace lavados vaginales tiene cinco veces más probabilidades de desarrollar vaginosis bacteriana que una mujer que no lo hace, pues un equilibrio saludable de bacterias evita que la levadura vaginal crezca demasiado y eliminar el equilibrio natural puede permitir que la levadura florezca. 

 

Enfermedad pélvica inflamatoria

La enfermedad inflamatoria pélvica es una infección que se desarrolla en los órganos reproductores. La mayoría de los casos son causados ​​por infecciones de transmisión sexual, las cuales son más probables en mujeres que realizan esta práctica. Las duchas vaginales aumentan el riesgo de enfermedad inflamatoria pélvica en un 73 por ciento. 

 

Cervicitis

La cervicitis es una inflamación del cuello uterino y suele ser el resultado de una infección de transmisión sexual, pero las mujeres que se hacen lavados vaginales también tienen más probabilidades de desarrollar esta afección.