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¿Cuáles son los beneficios y riesgos de una dieta baja en carbohidratos?

Un equipo de investigadores retomó varias publicaciones para obtener sus resultados

Las dietas para bajar de peso son un tema recurrente y una de las más sonadas es la dieta baja en carbohidratos (LCD, por sus siglas en inglés), la cual ha ganado popularidad con el paso de los años hasta la actualidad y, sin embargo, esto no le ha impedido generar controversia sobre sus beneficios y limitaciones, las cuales han tratado de ser explicadas por un equipo de investigadores.

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Tras realizar una revisión de artículos “relevantes escritos en inglés a partir de un búsqueda en PubMed (motor de búsqueda de libre acceso que permite consultar la base de datos de MEDLINE)”, el equipo de investigadores publicó sus resultados en la revista Nutrients.

En sus hallazgos, los investigadores, señalan que las dietas bajas en carbohidratos son eficaces a corto plazo (hasta 6 meses) para la reducción de masa grasa y la remisión de la diabetes mellitus de tipo 2.

“La adopción de la dieta baja en carbohidratos da como resultado un suministro reducido de carbohidratos al hígado que a su vez provoca una reducción en la conversión de carbohidratos excesivos en ácidos grasos y una mayor lipólisis.

“También hay una reducción en los niveles de insulina plasmática que libera el impulso de almacenar grasa dentro del tejido adiposo, que finalmente se manifiesta en una pérdida progresiva de grasa corporal”, señalan los autores.

Los beneficios metabólicos de las LCD van más allá de la reducción de masa grasa, pues ayuda a la posible mejora contra futuras enfermedades cardiovasculares en pacientes con prediabetes y diabetes mellitus tipo 2.

Sin embargo, los investigadores catalogaron como “decepcionantes” los datos a largo plazo de la dietas bajas en carbohidratos, pues su eficacia y practicidad son limitadas, ya que la ‘ventaja’ que tienen de una mayor pérdida de peso a corto plazo, en comparación a otras dietas tradicionales restringidas en calorías, “desaparece o disminuye después de un año”, establecieron los investigadores.

El artículo también menciona que las dietas bajas en carbohidratos pueden derivar en desequilibrios nutricionales como deficiencias dietéticas de “minerales, vitaminas y oligoelementos”, así como problemas asociados con la salud ósea, cálculos renales y, ocasionalmente, retraso del crecimiento.

Los investigadores también mencionaron que la cetosis persistente y sostenida puede ser un problema asociado a las LCD.

“A corto plazo, estos incluyen posibles síntomas gastrointestinales como vómitos, diarrea, estreñimiento, reflujo gastroesofágico e hipoglucemia. Los efectos a largo plazo de la cetosis sostenida en el cuerpo no se comprenden completamente. Sin embargo, puede provocar la liberación de depósitos de calcio para neutralizar las cetonas, con un riesgo teórico de osteoporosis y nefrolitiasis”, establecen.

Además, “una escasez relativa de ingesta de fibra dietética en las LCD (debido al predominio de alimentos ricos en grasas y proteínas de origen animal, y la falta relativa de alimentos de origen vegetal” puede causar estreñimiento y otros problemas de salud.

Por supuesto, también se debe tener en consideración las limitaciones propias de los individuos, ya que:

“Cualquier cambio de comportamiento exitoso requiere un enfoque, impulso, determinación y determinación sostenidos […] El éxito a largo plazo de cualquier modificación dietética depende de su aceptación por parte del individuo y de su aplicabilidad práctica y, lo que es más importante, del disfrute asociado con su adopción”, menciona la publicación.

Pese a los pros y contras establecidos, el texto establece que la modificación dietética debe adaptarse al individuo, con evaluaciones cuidadosas a priori de las preferencias alimentarias para garantizar la aceptabilidad y el cumplimiento a largo plazo y con evaluaciones a posteriori de las respuestas altamente individuales a la dieta baja en carbohidratos. Por supuesto, también se deben incorporar otros aspectos como el ejercicio físico.