El consentimiento sexual es uno de los principales acuerdos para llevar actividades de índole sexual, por ello la importancia de tener muy claro qué es y en qué consiste, pues de no estar presente dicho consentimiento, estamos hablando de un abuso.
¿Qué es el consentimiento sexual?
El consentimiento sexual es un acuerdo para participar/llevar a cabo una actividad sexual. Previamente a mantener relaciones sexuales con otra persona (haya o no una penetración) ambas partes deben saber que están de acuerdo con lo que se va a suscitar.
Por ello, la importancia de exponer ante la pareja aquellas situaciones que puedan llegar a parecer incómodas y que no se quieran llevar a cabo. La honestidad en la pareja es pieza fundamental para tratar los temas de consentimiento sexual.
Consentir (estar de acuerdo) y pedir permiso, se basa en establecer límites personales y respetar los de la pareja. Preguntar una y otra vez si las cosas son claras (en caso de notar algún disgusto o incomodidad).
Actuar de manera consensuada es básico para que todas las veces que se lleven a cabo las relaciones sexuales en pareja sean consentidas sexualmente.
Es importante decir que, el consentimiento debe ser una opción que se toma libremente y sin la presión e influencia de otra persona, incluso, se debe tomar en cuenta que tampoco hay una influencia de drogas o alcohol, pues al estar bajo los efectos de estas sustancias se puede perder el grado de conocimiento y decisión consciente.
Otro punto a tomar en cuenta es que, el consentimiento sexual se puede “revertir”, es decir, si hay algún arrepentimiento que consista en no llevar a cabo el acto sexual, es válido y debe ser respetado por la otra parte.
Si deseas más información sobre el consentimiento sexual, puedes recurrir a páginas de Internet con información brindada por especialistas en el tema o acudir directamente con un experto.