TRáFICO

Familias de Campeche temen por sus viviendas tras cambios en obra del Tren Maya

Hace más de dos años, se proyectaba que el tren tendría vías nuevas para pasar por fuera de la ciudad. Después se informó que se usaría el derecho de vía de la vieja ruta del tren de carga, que atraviesa el centro de la ciudad.

  • A escasos metros de las vías del viejo ferrocarril hay decenas de comercios y viviendas

En Campeche, el cambio en los trazos originales de la obra del Tren Maya tiene en la incertidumbre a decenas de familias que viven literalmente al lado de vías del tren. 

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“Lo único que, sí queremos saber, cómo va a entrar ese tren aquí en Escárcega. Estamos en la peor incertidumbre, porque aquí en fonatur constantemente está cambiando todo y sin aviso”, dijo la comerciante Josefina Góngora.

Comerciantes y habitantes de las Calles 31, avenida Héctor Pérez y Justo Sierra, en Escárcega, Campeche, denuncian que Fonatur cambió por tercera ocasión el proyecto del tramo 2 del Tren Maya, de Escárcega a Calkiní.

Hace más de dos años, se proyectaba que el tren tendría vías nuevas para pasar por fuera de la ciudad. Después se informó que se usaría el derecho de vía de la vieja ruta del tren de carga, que atraviesa el centro de la ciudad.

“Nos vienen a explicar, que el tren va a pasar elevado de 6 a 7 metros, que no nos va a perjudicar”, agregó la señora Josefina.

El pasado 4 de enero, Fonatur informó que la estación del tren estará en el centro de Escárcega, tendrá tres vías y dos andenes, y que correrá a ras de tierra. A escasos metros de las vías del viejo ferrocarril hay decenas de comercios y viviendas, asentados desde hace 50 años, como los dos locales que renta doña América junto a su casa, la mujer tiene 81 años de edad, su propiedad está a cinco metros de distancia de las vías. 

“Este es uno de mis locales, pues de eso vivo. En contra el proyecto, no estamos, solo estamos de que cómo quien dice, nos dejen nuestro espacio para trabajar”, reiteró América Escalante.

Familias de Campeche temen por sus viviendas tras cambios en obra del Tren Maya. FOTO Cuartoscuro

Decenas de familias de ferrocarrileros dicen que también se verán afectados por la ampliación de las vías del tren. En esta zona, hace medio siglo, Ferrocarriles Nacionales de México entregó vivienda para sus trabajadores.

“¿Ha venido alguien a decirles que va a pasar con sus propiedades? Hasta ahorita nadie ha venido, en caso de que nos quitaran, pues que nos paguen. Bien pagado meramente, no nos vayan a venir una miseria”, reiteró Aurora López Rebolledo, habitante de Escárcega, Campeche.

“A mis parientes de allá ya hicieron que quitaran sus casas, le están dando 2 mil 500 mensual, para que ellos paguen su renta mientras les hacen sus casas”., añadió Carmen Rebolledo, habitante Escárcega, Campeche.  

La Ruta 2 del tren, que recorre el estado de Campeche, enfrenta otro conflicto en el ejido Felipe Carrillo Puerto, municipio de Champotón, aquí se encuentran enfrentados ejidatarios con habitantes del pueblo por el derecho de vía.

“Soy una de las personas afectadas, que vive en esas casas de la vía de ferrocarril, que hace años, que la tengo agarrado, esas casas estaban abandonadas, he vivido ahí con mis hijos casi 18 años”, destacó Madai Hernández. 

“Ya tiene exactamente como 27 años o más que fue abandonado, acá crecieron mis niñas, que ya son ahorita una familia, tienen esposo, tienen hijos”, comentó Sandra Kamal.

A inicios de enero, las empresas constructoras del Tren Maya demolieron 20 casas de Ferrocarriles Nacionales de México, donde vivieron estas familias. En octubre pasado, Fonatur y Conavi prometieron reubicarlos y construirles casas, de 754 mil pesos, pero las obras no avanzan.

“No tenemos casas dónde vivir, no hay casas para rentar, ni para irnos en otro lado”, afirmó Madai Hernández, habitante Felipe Carrillo Puerto, Champotón.

Con los tres mil pesos que reciben para rentar comenzaron a construir a un costado de las casas demolidas. Los ejidatarios de Carrillo Puerto se oponen a estas construcciones, a pesar de que a ellos el Gobierno federal les pagó una indemnización de 18 millones de pesos por el derecho de vía, que les adeudaban por la expropiación de Ferrocarriles Nacionales de México.

“No quiere que nosotros nos quedemos acá. Este es el cuartito que yo construí, que saqué a créditos, me endeudé para construir este pedazo, para que mis hijos tengan donde dormir.”, concluyó Madai Hernández.

Con información de Fátima Monterrosa

KAH