Este fin de semana el presidente López Obrador supervisó los trabajos del Tren Maya; el trazo original se ha modificado en al menos tres ocasiones; la última modificación se hizo a pesar de que en esa parte los trabajos ya estaban muy avanzados.
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Desde hace una semana, los trabajos del primer tramo del viaducto elevado, por donde pasaría el Tren Maya, en medio de la carretera federal 307, que comunica a Playa del Carmen con Tulum, se detuvieron y lo que se alcanzó a construir en cinco meses, hace unos días empezó a ser demolido.
Sobre lo que pasó y si se canceló la obra, un trabajador del tramo 5 del Tren Maya, comentó:
“Hasta ahora no, nos han confirmado, sí estamos trabajando, todavía. Estamos esperando órdenes”, dijo el trabajador.
De esta autopista, principal vía de comunicación de la Riviera Maya, se cortaron y desenterraron 22 mil árboles, se retiraron luminarias, señalizaciones y se demolieron camellones. En medio de la carretera, colocaron una veintena de cimientos y columnas, que sostendrían trabes y ballenas, por donde pasaría la vía férrea, pero la obra se quedó en pleno arranque, enfrentando retrasos y sobrecostos. Cientos de toneladas de acero, varillas y cemento, que compraron para este trazo, quedaron sin usarse y se desconoce su destino final.
“Quiero pedir que se le finquen responsabilidades a los de Fonatur y a todos los que intervinieron en esto, porque se perdieron 500 millones pesos, solamente esta ocurrencia y se van a perder 500 millones de pesos más, en reparar todo este daño que se hacen”, indicó Marciano Toledo, del Grupo Cívico 28 de Julio, en Playa del Carmen, Quintana Roo.
El pasado 19 de enero fue cancelado el paso elevado de Playa del Carmen y el trazo del tramo 5 sur, de 70 kilómetros, se cambió de Playa del Carmen a Tulum. Se dijo que, ahora, el tren transitará a ras de tierra, pero todavía no se tiene consolidado el nuevo tramo.
“Lo que queremos es que esa obra deje huella y que realmente tenga el uso que debe de tener, como líder empresarial, lo que quiero, lo mejor para nuestro territorio y lógicamente que gastemos el menos posible”, señaló Marc Pujol, presidente de Coparmex Riviera Maya.
Organizaciones civiles de la Riviera Maya sostienen que el tramo elevado es inviable ya que constantemente se registran hundimientos, como el que ocurrió el 13 de junio de 2020, a 5 kilómetros de Puerto Aventuras.
Se reportó una explosión grande y se trata de un rompimiento, un socavón, de aquí, debajo de la carretera, comentan que atraviesa de lado a lado la carretera.
Un grupo de espeleólogos acudió a la zona colapsada y verificó que se trataba de una caverna con ríos subterráneos y en su interior encontraron fósiles milenarios; el sitio permaneció abierto durante un año.
“Encontramos los organismos de cuevas que se hallan en esta zona; es una cochinilla acuática ciega de cuevas que es uno de los animales del ensamble de fauna, que vive en esta región. Son especies endémicas de la Península de Yucatán”, dijo Roberto Rojo, del Círculo Espeleológico dl Mayab, Quintana Roo.
Cuando empezaron los trabajos del tren, le colocaron cimentaciones, pilotes de acero y la rellenaron para darle paso al viaducto elevado, ahora, por los daños que se causaron a la caverna acuática, fue bautizada con el nombre de “Me lleva el tren”.
Sobre los miles de árboles que se talaron y retiraron del camellón central de la carretera federal, desde Cancún a Tulum, Fonatur aseguró que fueron reubicados y trasplantados en espacios públicos, avenidas y parques de Playa del Carmen, Puerto Morelos y Cancún, se constató que muchos no sobrevivieron.
“En esta avenida tenemos unos árboles que tumbaron, esta devastación que hicieron de estos árboles, como aquí este, siricote, se secaron, estos ya están muertos, estos ya no van a revivir”, apuntó Marcos López Díaz, de Vecinos Unidos A.C., en Playa del Carmen.
Otros arboles fueron reubicados en un camino alterno que se construye para el Tren Maya, en medio de la nada.
“Porque sacrificaron a todos esos árboles tan hermosos, que ya teníamos sobre la carretera federal y a final de cuentas lo vienen a meter, a esta zona, estos árboles no van a pegar”, comentó Marcos López Díaz, integrante de Vecinos Unidos A.C. en Playa del Carmen.
Con información de Fátima Monterrosa y Víctor Olvera.
LLH
