El Pleno de la Suprema Corte de Justicia de la Nación definió, el jueves 11 de noviembre de 2021, los límites territoriales entre Chiapas y Oaxaca, en la zona de Los Chimalapas.
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Determinó que el municipio de Belisario Domínguez, creado por Chiapas mediante decreto en 2011, pertenece al territorio oaxaqueño.
“Se ordena a los congresos de los estados de Oaxaca y Chiapas para que, en el plazo de 30 meses, contados a partir de la notificación que se les haga de los puntos resolutivos de esta resolución, realicen las modificaciones pertinentes a sus constituciones y leyes respectivas a efecto de qué incorporen los puntos limítrofes de la frontera que han sido reconocidos en esta sentencia”, señaló Fernando Franco González Salas, ministro de la SCJN.
Para determinar que Los Chimalapas son parte del territorio oaxaqueño fue necesario realizar una investigación y revisión de documentos y mapas históricos por parte de peritos e historiadores.
El único ministro en contra fue Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena.
“Me pregunto, ¿esta Corte debería ser indiferente al derecho humano sobre la autodeterminación de su identidad cultural de los pueblos y comunidades indígenas afectados, sólo porque las autoridades de dos entidades federativas coinciden en que su frontera debe definirse con base en lo impuesto por el pasado colonial?, mi respuesta es negativa”, señaló Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena, ministro de la SCJN.
Por la complejidad social y política de esta resolución, los efectos deben ser instrumentados paulatinamente durante los próximos tres años.
“Éste es un asunto muy delicado que excede mucho a una simple división de límites, aquí subyace un problema político y social delicado, y yo considero plausible que el ministro ponente haya intentado establecer una serie de efectos que involucra no sólo a los dos estados, a las dos entidades federativas confrontadas con esta cuestión de límites, sino también el gobierno federal para buscar soluciones y alternativas qué, con paz social, privilegien el bienestar de las personas, de las comunidades de los pueblos indígenas que viven en esta zona”, puntualizó Arturo Zaldívar, ministro Presidente de la SCJN:
Durante la sesión del próximo lunes, los ministros continuarán con el análisis de los efectos y alcances que tendrá esta decisión de la Corte.
“Al realizar las modificaciones ordenadas en esta ejecutoria las autoridades legislativas y administrativas deberán respetar tanto las obligaciones vigentes como todos los derechos adquiridos con anticipación a la delimitación de los puntos limítrofes de la frontera entre ambas entidades. Incluso, en caso de que sea necesaria la transferencia de servicios públicos de una jurisdicción a otra esta debe realizarse de manera gradual, ordenada en el plazo indicada y de conformidad con las disposiciones legales aplicables. En todo caso la prestación de servicios públicos a la población no podrá interrumpirse. Me parece que debemos pensar que esas son las reales implicaciones”, compartió Javier Laynez Potisek, ministro de la SCJN.
Técnicamente se estableció que la línea limítrofe entre Oaxaca y Chiapas, particularmente en la zona en disputa, “iniciará en la barra de Tonalá a los 16° de latitud norte en dirección noroeste hasta el cerro del Chilillo, de ahí con dirección noroeste hasta el cerro de la Jineta y de ahí con rumbo noroeste hasta el cerro de los Martínez”.
Con información de Jessica Murillo
HAVJ
