Este sábado, un restaurantero de Rosarito, Baja California, acudió al albergue donde permanece la caravana migrante en Tijuana para ofrecer trabajo.
“Vengo a buscar empleados capacitados que creo que sí hay, en este momento busco cocineros, meseros, realmente hace falta en Rosarito mano de obra calificada”, dijo Rubén Torres, restaurantero, quien explicó por qué decidió trasladarse a la zona norte de Tijuana y ofrecer empleos a los migrantes.
Yo creo que entre esta gente hay gente buena, la verdad gente que viene a eso, tiene un sueño, ha sufrido más de tres mil kilómetros para llegar hasta Tijuana, yo creo que busca trabajo, busca progresar y la verdad yo vengo de abajo también”, comentó el empresario.
Al llegar, se enteró que debía registrarse en la Feria del Empleo, pero rápido se corrió la voz entre los migrantes y se comenzaron a acercar a él.
Hizo entrevistas, buscaba a cuatro personas y finalmente se fueron cinco con él.
Me llevó cinco personas: tengo dos cocineros, un electricista, un lavaplatos y un mesero, van a estar a prueba este fin de semana”, comentó el restaurantero.
“Yo soy técnico en electricidad, también he laborado en otros como contador y finanzas, he trabajado en restaurantes también”, dijo Dany Morán, uno de los migrantes.
Sé cocinar pollo, sé cocinar costillas de cerro y alitas de pollo y primero Dios nos vamos a enfrentar a un reto que son los mariscos, pero le vamos a echar ganas”, aseguró otro de los migrantes que se fue a prueba.
Les ofrecieron seis de trabajo a la semana por uno de descanso con un horario de 1 de la tarde a 9 de la noche y de 10 de la mañana a 4 de la tarde. El sueldo es de mil 800 pesos semanales. La comida y el hospedaje son gratis.
Le doy gracias a él y a Dios por la oportunidad que nos está dando de empleo”, agradeció Enrique Lara, otro de los migrantes a prueba.
Con el restaurantero iba un exintegrante de la caravana que empezó a trabajar en su restaurante hace dos semanas.
Su sueño, como el de la mayoría, es llegar a Estados Unidos, pero mientras se realiza, dice, tiene que comer y buscar sustento.
Con información de Sarahí Méndez
LHE
