ECOLOGíA

Aumenta la crisis del mero en Yucatán; la especie podría estar en peligro

Investigadores advierten que el mero podría estar en peligro de extinción, debido a la sobreexplotación

En Yucatán, más del 50 por ciento de la flota pesquera dedicada a la captura de mero está paralizada por la falta de producto.

La flota está compuesta por 12 mil 500 pescadores que laboran en 4 mil barcos de altura y 15 mil lanchas de ribera, que están atracadas en los principales Puertos de abrigo.

Los barcos, la mayoría están amarrados porque no sacan su gasto para volver a ingresar al mar”, dijo Javier Uscanga, dueño de barco pesquero.

“Es la peor temporada de mero, hay muy poco pescado”, refirió Rubén, pescador.

La temporada de pesca del mero en Yucatán inició el 1 de abril y culmina el 30 de enero. Cada año desde 2005 a 2017, se capturaban alrededor de 9 mil toneladas, el año pasado se llegó a 6 mil 500, la más baja en su historia.

Venían los barcos hasta con 14, 18 toneladas. Han entrado barcos con 400 kilos de 25 a 30 días. En 8, 9 brazas llenabas tu barco en 8 días, ahorita en 20 días traes 400, 500 kilos”, señaló Luis Antonio, Asociación de Pescadores de Puerto Progreso.

Investigadores señalan que el mero está sobreexplotado, además de factores como la contaminación y cambio climático.

Señalan que en los años de 1970 se lograban capturar de 20 mil toneladas, mientras que en el 2018 se capturaron 4 mil toneladas, por lo que se encuentra catalogado como vulnerable.

La situación poblacional del mero es alarmante debido a que ha habido una disminución en el volumen de captura. El mero pasó de estar cercanamente amenazado a vulnerable, está a punto de estar en peligro”, advirtió Alfonso Pereira, biólogo Marino de la Universidad de Yucatán.

Autoridades del gobierno de Yucatán señalan que a pesar de que se permite la pesca del mero, hay vigilancia para evitar la captura de tallas mínimas, una de las principales medidas para proteger la especie.

La talla mínima es de 36.3 centímetros y eso no se está respetando y tenemos que buscar no solo la veda sino el respeto a las tallas mínimas”, destacó Rafael Convaluzier, secretario de Pesca en Yucatán.

La veda del mero es de dos meses al año y podría prolongarse a tres, en caso de que la biomasa continúe en descenso en el Golfo de México.

Con información de Alejandro Sánchez.

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