En el marco del Día Internacional del Migrante, así fue el reencuentro de Lily, Alan y Diane con su mamá María Ricarda Ortiz Hernández, después de cinco años de no poder abrazarla porque fue deportada a México por autoridades de migración de Estados Unidos.
“Estoy muy orgullosa de ellos porque no solamente yo, ellos han pasado por todo esto, es muy difícil de sobrellevar y lo lograron, ellos fueron mi pilar, ellos y mis papás y mis niños y siempre tuvimos esa promesa de buscar la manera de volver a estar juntos y ellos me supieron esperar”, indicó María Ricarda Ortiz, migrante deportada.
La oficina de Derechos Humanos del gobierno municipal de Ciudad Juárez, Chihuahua, y las organizaciones civiles Asociación Dreamers Mom, Fundación Ángeles de Esperanza, Asociación Americana Capellanes, Ministros contra el Crimen y Ministros en Derechos Humanos, lograron reunir a estos menores con su madre.
“Estuve tocando puertas, pidiendo ayuda y lo único que encuentra a veces uno, es que te vuelvan a señalar como un criminal y nunca ven ellos, a mí ellos, ellos no hicieron nada y son quienes pagan más, entonces no tengo más que decir, más que estoy feliz, muchísimas gracias”, externó María Ricarda Ortiz, migrante deportada.
María Ricarda vivió como indocumentada en Estados Unidos durante más de 15 años, hasta que fue deportada en noviembre del 2013, desde entonces, sólo a través de redes sociales mantiene contacto con sus hijos, hasta hoy que volvió a verlos en el Palacio Municipal de Ciudad Juárez.
“Me sentí muy feliz de ver a mi mamá otra vez porque me dolía verla en la pantalla y no la podía abrazar”, dijo Lily Yonit, hija menor.
Los tres niños fueron contactados por la organización Dreamers Moms, así como Ángeles de Esperanza en Atlanta, Georgia, y desde ahí viajaron a El Paso, Texas, y cruzaron la frontera a Ciudad Juárez para reunirse con su mamá.
“Decían que ellos tenían cinco años sin ver a su mamá y que ellos querían, su sueño reunirse con ellos, entonces viendo, verdad, que nos conmovió a todos en la asociación y de Ángeles de Esperanza, entonces decidimos invitarlos a la convención que tuvimos en Atlanta, Georgia”, relató María de los Ángeles, integrante de Ángeles de Esperanza.
“Yo creo que es el primer paso de muchos encuentros, la fundación Ángeles de Esperanza eso quiere hacer, quiere crear esos encuentros, este es el primero, esperemos de muchos encuentros de ese tipo”, destacó Rogelio Pinal, director de Derechos Humanos del Gobierno local.
Alán, Lily y Diane, pasarán la Navidad y Año Nuevo con su madre en Aguascalientes y después regresarán a Estados Unidos porque son ciudadanos de ese país.
Con información de Francisco Javier Carmona.
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