México debe contar con un Consejo Fiscal Independiente para apoyar el diseño del presupuesto y mejorar el manejo de la deuda del país, señaló Emiliano Amoroso, director de Análisis Macroeconómico del Banco de México (Banxico).
Sin embargo, matizó, para que un consejo fiscal en México funcione, debe ser independientes, vinculante y con “dientes”; además, los expertos que lo formen deben ser muy buenos.
“Yo creo que es imperativo hacerlo; y si lo vas a hacer, hacerlo bien, y que sea efectivamente independiente, que tenga dientes, además, que sea vinculante […] y los expertos tienen que ser muy buenos, porque si va a ser creíble y va a ser vinculante tiene que tener una muy buena evaluación”, apuntó el funcionario de Banxico.
Al participar en el Foro Nacional de Infraestructura del Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas (IMEF), el directivo explicó en el panel Estabilidad Macroeconómica que, a título personal, una de las ventajas de crear un Consejo Fiscal Independiente es que, si se presentan choques externos en la economía, los expertos del Consejo reconocen si es temporal o permanente y hacen recomendaciones para evitar deterioro de las finanzas públicas. Además, estimaría el balance estructural, es decir, descontaría los elementos temporales que puedan llevar a un deterioro fiscal.
“Tener un consejo fiscal permitiría decir: no nos preocupemos, esto es un choque temporal y podemos correr un mayor déficit, nos vamos a endeudar, pero nos vamos a recuperar y a pagar este mayor endeudamiento en los años siguientes a tasas menores”, abundó.
Agregó que mientras más fortaleza fiscal tenga un país, siempre se facilita la conducción de la política monetaria, por lo que un consejo que fortalezca la postura fiscal tienes que ser conducente a facilitar tal política.
Amoroso indicó que la economía mexicana tiene pilares que dan estabilidad y esos no deben ser modificados, como la política comercial muy abierta, que ha estado detrás de la transformación y ha llevado al país a ser altamente exportador.
También, dijo, un régimen de tipo de cambio flexible, que permite amortiguar choques y ser variable de ajuste, y un sistema financiero bien capitalizado son pilares de la economía nacional.
El Fondo Monetario Internacional (FMI) ha insistido en la recomendación sobre la implementación del Consejo Fiscal Independiente, haciendo hincapié en que dicho órgano aumentaría la transparencia del debate sobre la política fiscal de México y profundizaría la base técnica del mismo, como se ha hecho exitosamente en otros países miembros de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).
A pesar de este planteamiento, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) del actual sexenio ha sido firme en su rechazo a la creación de un órgano de esta naturaleza bajo el argumento de que en México existen mecanismos de revisión independientes de las finanzas públicas y que, en ese sentido, se llevaría a cabo un análisis redundante.
El Consejo Fiscal Independiente propuesto estaría conformado por cinco integrantes, con reconocidas capacidades, que serían ratificados por el Senado de la República. Las recomendaciones del organismo, tras llevar a cabo un análisis de las políticas públicas relacionadas con la política fiscal, la política tributaria, el ejercicio de presupuesto de egresos, el control del déficit fiscal y el endeudamiento del país, tendrían que ser adoptadas obligatoriamente por las autoridades hacendarias.
Si se creara el Consejo, Hacienda perdería independencia en la toma de decisiones. Actualmente la SHCP es rectora en materia de política fiscal y un organismo alterno le quitaría autonomía en el tema.
(Con información de Guadalupe Flores)
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