El servicio de Inmigración y Aduanas de Estados Unidos detuvo a 280 indocumentados luego de una redada en una empresa de teléfonos en Allen, Texas, mientras tanto, del lado mexicano, hubo una ligera mejoría en los tiempos para cruzar al otro lado.
En el sur, en Chiapas, los migrantes africanos empezaron a realizar su registro ante autoridades de migración.
El servicio de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos abrió cuatro de 12 garitas en el Puente Internacional Paso del Norte, seis de las 14 en el puente Córdova de las Américas y seis de 12 en el puente Zaragoza Isleta.
El paso por las garitas exclusivas para transporte de carga aún es lento y las filas alcanzan los siete kilómetros.
Avanzo cincuenta metros cada 40 minutos, ya llevo ocho horas aquí”, dijo Roberto Gómez, chofer, quien agregó “llevo entre siete y ocho horas, desde las siete de la mañana que llegamos y si está muy, muy lenta”.
Las medidas que tomó el gobierno de Estados Unidos esta semana han comenzado a afectar las actividades económicas del lado mexicano.
La afectación que se hace a la industria que esta domiciliada o que crea por esta región es bastante grande, nosotros por Ciudad Juárez exportamos 11 millones de dólares por hora, alrededor de 47 mil millones de dólares al año”, detalló Manuel Sotelo de la Asociación de Transportistas de Ciudad Juárez.
Mientras esto ocurre en el norte, en la frontera sur, el Instituto Nacional de Migración (INM) comenzó el preregistro de migrantes africanos y haitianos que llevan más de un mes esperando para realizar el trámite migratorio en Tapachula para poder continuar su camino hacia Estados Unidos.
Hoy en día estamos mejor porque ellos están atendiéndonos a nosotros, pero nosotros tenemos mucho tiempo aquí que dormimos en el suelo, pero ahora yo me siento bien porque ellos nos atienden a nosotros”, comentó Anel Jean, migrante haitiana.
“Ya es un logro porque obviamente estaba paralizado, pero sabemos que la población migrante ha estado todos los días”, dijo Ángel Milton Ordoñez, visitador general de atención a migrantes de la Comisión Estatal de los Derechos Humanos (CEDH).
La directora de Control y Verificación migratoria, Ana Laura Martínez, fue interceptada por los africanos que le reclamaron las agresiones de las que han sido objeto durante estos días.
Con información de Juan Álvarez y Francisco Javier Carmona
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