Cientos de personas, entre residentes y transportistas, tuvieron hoy que esperar durante horas para pasar en los cruces internacionales entre Ciudad Juárez y El Paso.
La razón: no había suficientes agentes del lado estadounidense.
Y es que los mandaron a procesar las miles de solicitudes de asilo de los migrantes centroamericanos que a diario se están entregando a las autoridades del otro lado.
“No sé, está muy lenta la línea, ya tenemos hora y media y mire donde vamos”.
Cuatro de las 15 garitas en El Paso, Texas, fueron abiertas para revisión de vehículos y una sola para los peatones.
“Es que hay mucha fila y no está avanzando nada”, destacó Sofía Martínez, estudiante.
Estudiantes que viven en Ciudad Juárez y cruzan todas las mañanas para ir a la escuela, faltaron a clases por las filas que se formaron en los puentes internacionales.
“La vez pasada también cuando empezó todo esto de la caravana, también se habían cerrado los puentes y las filas empezaron a tardar y a nosotros que cruzábamos pues nos empezaron a checar mucho”, apuntó Perla, estudiante.
El cierre de los cruces se debe a que unos 750 agentes de aduanas y protección fronteriza de estados unidos, incluyendo a oficiales de el paso, fueron asignados para que ayuden a procesar a los migrantes indocumentados que buscan pedir asilo y que siguen llegando a la frontera.
Cientos de ellos han pasado días retenidos bajo un puente enrejado que está a lado de las oficinas de procesamiento de detenidos de la Patrulla Fronteriza.
Ante las complicaciones en los cruces, elementos de tránsito de Ciudad Juárez tuvieron que intervenir.
“Estamos realizando cierres en retornos, calles contiguas, aledañas a los cruces internacionales, hoy nos aparece el cruce de Waterfill o Zaragoza, hasta la avenida Gómez Morín en saturación de vehículos que pretenden introducirse a los Estados Unidos, esta condición es sumamente atípica”, comentó Sergio Almaraz, director de Tránsito.
Con información de Francisco Javier Carmona.
LLH
