José Manuel fue uno de los voluntarios que prestó apoyo en el poblado de La Nopalera de Yautepec, Morelos, luego del sismo del pasado 19 de septiembre.
La gente había perdido sus casas, no podían entrar y los que llegaban evaluaban sus casas y decían la vamos a demoler”, dijo José Manuel Terán.
Hace un año perdió parte del brazo derecho en un accidente de trabajo.
Estaba moliendo carne y le agarró la máquina su mano pues”, indicó María del Refugio Pérez, abuela de José Manuel.
Pero la falta de una de sus extremidades no ha sido impedimento para ayudar a sus vecinos en la remoción de escombros y en la reconstrucción de las casas que resultaron estructuralmente afectadas.
Le gusta trabajar, aunque sea así con su tronquito le hace, le hace a la pala”, aseguró María Refugio Pérez.
Así se observan desde las alturas los daños en el poblado de La Nopalera, a una semana del sismo.
La Ayudantía Municipal, la Iglesia la Guadalupana, el kínder, la primaria, el centro de salud y más de 150 casas sufrieron daños estructurales o se vinieron abajo.
Es más fácil contar las que están de pie que las que están derrumbadas”, destacó Lucinio Baena, ayudante municipal de La Nopalera.
Este miércoles José Manuel salió de su casa antes de las 08:00 horas de la mañana para ir a trabajar.
Ha sido rechazado en varios empleos por no tener ambas manos.
Consiguió el puesto de ayudante de albañil en la demolición de una casa que resultó parcialmente afectada.
Yo siempre he dicho que el limitante está en la mente no en el cuerpo y el ejemplo es él”, expuso José Alonso Vázquez, empleador.
Recibirá un sueldo de mil 200 pesos semanales, lo que le permitirá llevar lo necesario para cubrir las necesidades de sus dos hijos y de sus dos hermanos menores, que quedaron desamparados por la reciente muerte de su madre.
Yo cuando tenía las dos manos tenía la ilusión de poder trabajar en una fábrica o trabajar de policía”, dijo José Manuel.
José Manuel concluyó la preparatoria y quiere ser médico veterinario.
Me gustaría ser eso, pero se requiere de tiempo y esfuerzo, pero yo necesito trabajar para mantener a mis hijos”, aseguró José Manuel Terán.
En la reconstrucción de La Nopalera participan elementos del Ejército Mexicano.
Se instaló un centro de acopio donde se reparten alimentos, víveres y ropa a las familias damnificadas.
La Nopalera se localiza a 65 kilómetros de Cuernavaca, Morelos, el poblado más cercano es la cabecera municipal a nueve kilómetros de distancia.
Es la zona abandonada, por eso nos tienen considerados como de alta marginación. Tenemos un médico cada ocho días y la gente no se va a enfermar cada 8 días, un piquete de alacrán y que cosa hacemos”, apuntó Lucino Baena.
Con información de Carlos Guerrero.
LLH
