Este lunes, familiares, amigos, feligreses, sacerdotes y autoridades de la Arquidiócesis de Guadalajara, despidieron al sacerdote Juan Miguel Contreras García, asesinado la noche del pasado viernes, en la parroquia San Pio de Pietrelcina, en Tlajomulco de Zúñiga, Jalisco.
Su cuerpo fue trasladado a la comunidad de El Salvador, municipio de Tequila, de donde era originario.
El cardenal José Francisco Robles Ortega, arzobispo de Guadalajara, presidió una misa de cuerpo presente. Ante más de 150 sacerdotes, pidió a las autoridades estatales esclarecer el homicidio, y aplicar la justicia contra los responsables.
Según la Fiscalía General de Justicia, el asesinato del sacerdote Juan Miguel Contreras García, no está relacionado con sus actividades pastorales.
Para las autoridades estatales hay una línea de investigación que apunta a asuntos personales, también se informó que uno de los agresores ya fue identificado.
“Sí hay una persona identificada, pero sí quisiera por un tema sigiloso de la propia carpeta de investigación guardar toda la mesura en el caso”, apuntó Roberto López Lara, secretario general de Gobierno de Jalisco.
Se informó que ante la Fiscalía del estado no se había interpuesto denuncias por supuestas amenazas contra quien fuera el vicario de la parroquia de San Pío de Pietrelcina, en la colonia Santa Fe.
Las primeras investigaciones detallan que la noche del viernes pasado, dos sujetos entraron a la Notaría Parroquial y dispararon varias veces contra el sacerdote de 32 años.
Tras cometer el asesinato, los dos atacantes huyeron a bordo de dos motocicletas.
Mediante un comunicado, las arquidiócesis de Guadalajara y Monterrey lamentaron el homicidio y exigieron a las autoridades esclarecer el crimen lo más pronto posible.
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Con información de Alejandra Parra.
LLH
