Mientras que las vacaciones suponen deudas, pensar en mudarse de país parece casi imposible. Por otra parte, si tramitar una visa de turismo puede ser difícil, una de trabajo lo es todavía más. No obstante, lo que pocos saben es que existen unas visas llamadas Working Holiday Visa que permiten trabajar y vacacionar en un país por cortos periodos de tiempo.
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Uno de estos países es Nueva Zelanda, en el cual jóvenes de entre 18 y 30 años de edad tienen permitido vivir por espacio de un año en el país, mientras trabajan de forma legal. Una de las limitantes es que está prohibido llevar niños consigo, pero las parejas pueden acompañar a los viajeros siempre y cuando también tramiten el documento.
Generalmente las visas normales establecen llegar a un lugar con los ahorros suficientes para sobrevivir, pero este no es el caso de Nueva Zelanda. Con su Working Holiday Visa, los viajeros sólo deben comprobar que tienen dinero suficiente para regresar a su país de origen.
Vista de la ciudad de Queenstown en Nueva Zelanda. (Instagram / purenewzealand)
Además, también se requiere que los viajeros lleguen al país con al menos 4 mil 200 dólares neozelandeses (aproximadamente 3 mil dólares estadounidenses) para soportar parte de su estadía mientras consiguen un empleo.
Para el caso de México las visas de trabajo/vacación a Nueva Zelanda consisten en un sencillo trámite al que se puede aplicar en línea directamente en la página de Internet del Ministerio de Negocios, Innovación y Empleo, pero las visas están limitadas a sólo 200 personas.
Otras de las restricciones en el país están principalmente orientadas al empleo. Por ejemplo, no está permitido trabajar por más de 3 meses para un solo empleador, no se puede trabajar por más de 12 meses, y no se puede tener un trabajo permanente.
El trabajo que se elija debe ser legal y está prohibido que consista en servicios sexuales o también, está prohibido dirigir o invertir en un negocio que provea servicios sexuales. En el caso de los estudios, sólo se permite realizarlos por el espacio de seis meses.
No obstante, todo apunta a que esta puede ser una extraordinaria oportunidad para jóvenes que deseen residir en este país. La visa también permite que el poseedor salga y regrese las veces que así lo desee mientras su documento esté vigente.
Las malas noticias: el trámite está cerrado este año, pero reabrirá en 2019. Es completamente gratuito y el documento está listo en sólo 17 días.
