La mañana del 29 de abril, murió en Mumbai, India, el reconocido actor de Hollywood y Bollywood Irrfan Khan. Hace dos años, en marzo de 2018, Irrfan Khan fue diagnosticado con un tipo raro de cáncer. Le detectaron un tumor neuroendocrino maligno que tuvo una progresión agresiva. Después de presentar una infección en el colon, un día antes de su muerte, ingresó a un hospital en Mumbai. Nunca volvió a salir.
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¿Quién era Irrfan Khan y por qué el mundo está tan adolorido por su partida?
La carrera de Sahabzade Irfan Ali Khan o Irrfan Khan, como todos lo conocían, empezó con la película Salaam Bombay! de Mira Nair, un drama que narraba la vida de niños en los bajos fondos de Mumbai. La película fue seleccionada, por The New York Times, como una de las mejores 1000 películas jamás hecha y fue nominada al Oscar como mejor película extranjera. Sin embargo, en el corte de la última edición, todas las escenas que grabó quedaron descartadas.
A partir de ahí, Khan pasó años complicados. A pesar de actuar en Kamla Ki Maut (1989), un drama sobre las relaciones afectivas en India y que recibió muy buenas críticas, Khan apenas podía conseguir trabajos menores en series de televisión de bajo presupuesto. Decepcionado tras años de no encontrar éxito como actor en India, Irrfan Khan estuvo a punto de abandonar su sueño.
Entonces apareció el cineasta británico Asif Kapadia que lo convenció de actuar en su nueva cinta, The Warrior (2001) como el personaje principal, un guerrero feudal en India que quiere dejar su vida de violencia. La película se proyectó en numerosos festivales internacionales y terminó ganando el BAFTA (el máximo honor en cine británico) como mejor película.
Esto impulsó la carrera de Khan que, poco tiempo después, actuó en la adaptación de Macbeth de Shakespeare, Maqbool (2003). Ese mismo año, Khan ganó el prestigioso Filmfare Award como mejor villano en una película hablada en hindi por su papel como el gángster estudiantil Ranvijay Singh en Haasil (2003).
En 2005, finalmente, Khan pudo entrar al selecto mundo de Bollywood con el thriller Rog. La película era una adaptación de Laura (1944) de Otto Preminger y consiguió que Khan fuera, realmente, reconocido como un enorme talento dentro del cine indio. Ya como parte de la élite de Bollywood, Khan ganó reconocimiento por sus papeles en Sainikudu (2006), en donde también actuó como villano y, sobretodo, en el musical Life in a… Metro (2007) que le dio su segunda nominación de Filmfare y lo catapultó como estrella internacional.
En 2007, Khan actuó, junto a Angelina Jolie en la película A Mighty Heart de Michael Winterbottom. La cinta tuvo una proyección, fuera de competencia, en el festival de cine de Cannes. También, apareció en un cameo en The Darjeeling Limited de Wes Anderson junto a Owen Wilson, Angelica Huston, Adrien Brody, Jason Schwartzman y Bill Murray.
Finalmente, en 2008, con la película Slumdog Millonaire dirigida por Danny Boyle, Khan se convirtió en una estrella internacional. La película fue nominada a diez premios Oscar, de los cuales ganó ocho, incluyendo mejor película, además de siete premios BAFTA. La actuación de Khan como el investigador de policía encargado al caso de Jamal fue aplaudida por medios internacionales y Danny Boyle dijo que ver a Khan trabajar “era algo verdaderamente hermoso”.
Después de que Irrfan Khan actuó en In Treatment, la serie de HBO creada por el colombiano Rodrigo García, Marc Webb, el director encargado de recrear al personaje de Spider-Man después de la serie de Sam Raimi y Tobey Maguire, quedó impresionado. Así que le ofreció un papel en The Amazing Spider-Man. Khan no estaba seguro de querer actuar en una película de superhéroes y el papel le pareció algo infantil.
Sin embargo, su hijo, emocionado por ver a su padre en una cinta de superhéroes, lo convenció de actuar en la cinta protagonizada por Andrew Garfield y Emma Stone. Su importancia creciente en Hollywood lo llevó a actuar en la nueva cinta de Ang Lee, Life of Pi. Ahí, entre una compleja producción de efectos especiales por computadora, Irrfan Khan destacó como la versión adulta de Pi Patel, el hombre que cuenta la maravillosa historia de un barco y un tigre para demostrar la existencia de Dios.
En 2013, Khan se afianzó como una estrella nacional e internacional con la comedia hindi The Lunchbox. La película recibió premios en el festival de cine de Cannes y fue galardonada como mejor película extranjera en los BAFTA. Esta comedia romántica epistolar, además, se convirtió en la película más exitosa en la taquilla de la India hasta ese momento. Un palmarés que no es despreciable considerando la enorme industria de cine y el enorme consumo de cine de la India. Aquí, Khan demostró que no se necesita ser una estrella juvenil, de belleza estereotípica, para actuar en una comedia romántica.
En cierto sentido, Khan se convirtió en un rostro empático de romance teniendo más de cuarenta y cinco años. Un poco como George Clooney y sus complejos papeles en The Descendants (2011) de Alexander Payne y Up in the Air de (2009) Jason Reitman.
Cuatro años después, con Hindi Medium, Kahn volvió a romper el récord de ventas en taquilla en la India. Nadie esperaba que la película fuera un éxito, pero esta comedia dramática sobre luchas de clase en Delhi sorprendió a todos y le otorgó a Khan, por fin, su primer premio Filmfare como actor principal.
Mientras tanto, Khan se aventuró a Hollywood y tuvo papeles secundarios en Jurassic World (2015) de Colin Treverwood y Inferno (2016) de Ron Howard. En la primera, Khan interpretó a Simon Masrani, el dueño de Jurassic World y empático CEO de Masrani Corp. El papel resultó particularmente interesante por la forma en que Khan logró darle un giro cómico y humano a la figura del CEO irresponsable que juega, sin ninguna imaginación, con el caos divino. Este papel ayudó a dar nueva vida a una franquicia agotada y recuperó el mismo estilo empático y cómico que el enorme Richard Attenborough había logrado en la primera película de Steven Spielberg.
En Inferno, por otra parte, Khan volvió a tomar un rol de villano empático como Harry “The Provost” Sims y aseguró un lugar en la élite de Hollywood actuando junto a estrellas estadounidenses como Tom Hanks, Felicity Jones y Ben Foster.
Durante los últimos dos años que tuvo de vida, Irrfan Khan no dejó de actuar. En 2018 hizo dos película en la india (Blackmail y Karwaan), además de Puzzle, un drama estadounidense dirigido por Marc Turtletaub (Little Miss Sunshine) y basado en la película argentina Rompecabezas.
Hasta su muerte, Irrfan Khan no volvió a conocer los días de aciego de los años ochenta y noventa. Fue uno de los rostros más reconocidos del cine indio y un hombre capaz de un enorme rango como actor. La profundidad sensible de su mirada lo convirtió en un ícono de empatía y valor moral.
En 2011, Khan fue galardonado con el cuarto honor cívico más importante de India, el Padma Shri. En ese momento, su carrera encontró la cima de los reconocimientos nacionales e internacionales y Khan se convirtió en una de las voces más importantes en las relaciones entre Bollywood y Hollywood.
En 2012, cuando estaba filmando Paan Singh Tomar sobre la vida del soldado, atleta y rebelde indio Paan Singh, Khan se quebró llorando en el set. Decía que este personaje le recordaba demasiado a su padre, un hombre igualmente arrogante y sensible. Khan empezó a planear entonces dirigir una película sobre él. El proyecto nunca logró concretarse y esta desafortunada e inesperada muerte nos quitó la posibilidad de ver dirigir a uno de los actores más sensibles de su generación.
Khan sabía que le quedaba mucho por dar. Cuando se enteró de su diagnóstico, así lo expresó:
“Estaba en otro juego, viajando en un tren a toda velocidad. Tenía sueños, planes, aspiraciones, metas, y estaba totalmente entregado a ellas. De pronto, alguien me tocó en el hombre y, cuando me volteé a ver, me dijo: “Tu destino está por llegar. Por favor, baja del tren.” Yo respondí: “No, no es cierto, mi destino no ha llegado”. Y me dijo: “Sí, esto es, así pasa a veces.”
Activista, visionario y gentil amigo, el mundo del espectáculo y de la política se volcaron en Twitter para llorar la muerte de Irrfan Khan. Tal vez, uno de los mensajes más conmovedores fue el que subió Colin Trevorrow, director de Jurassic World:
“Estoy profundamente triste por haber perdido a Irrfan Khan. Un hombre considerado que encontraba belleza en el mundo, incluso cuando estaba sufriendo. En nuestra última correspondencia me pidió, en medio de sus días más oscuros, que recordara “los maravillosos aspectos de nuestra existencia. Aquí está, riendo.”
Deeply sad to have lost #IrrfanKhan. A thoughtful man who found beauty in the world around him, even in pain. In our last correspondence, he asked me to remember “the wonderful aspects of our existence” in the darkest of days. Here he is, laughing. pic.twitter.com/8eAsSOO9Ie
— Colin Trevorrow (@colintrevorrow) April 29, 2020
Así se recordará a Irrfan Khan: como un espíritu encantador y sensible, un hombre que siempre supo ver lo bueno en la tragedia, una figura enormemente inspiradora para Inda y para Hollywood.
Que viva eternamente en sus películas.
