El presidente catalán Carles Puigdemont, está jugando a unas vencidas con el Estado Español.
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El próximo 1 de octubre pretende celebrar un referéndum que es ilegal, para saber si los catalanes quieren seguir perteneciendo al reino de España o prefieren ser independientes.
Pero no sólo es la Generalitat catalana. Muchos partidos separatistas y organismos como la ANC, la Asociación Nacional Catalana, también están favoreciendo la independencia.
Cuando un pueblo está decidido a afrontar todas las consecuencias posibles es que está decidido a afrontar todas las consecuencias posibles.
En las últimas elecciones autonómicas, un grupo de partidos independentistas, Junts per el sí, tuvieron que unirse para conseguir el poder.
Aquellas elecciones se vivieron en clave de referéndum. El 47 por ciento, votó a favor de la independencia, pero el 53 lo hizo a favor de partidos españolistas.
Aun así, los partidos separatistas siguen diciendo que la mayoría de los catalanes están a favor de la independencia.
Es dar la voz a un mandato democrático que surgió de las urnas el pasado 27 de septiembre, donde la mayoría del pueblo de Cataluña dijo que sí a un gobierno independentista.
Desde la presidencia del gobierno se sigue diciendo que este referéndum no se va a celebrar porque es ilegal. Sin embargo, los partidos independentistas y los independentistas en general siguen haciendo campaña y proselitismo a favor del sí.
Ahora bien, una supuesta independencia con respecto de España, tendría muchas consecuencias. Principalmente económicas y sociales.
Aparte de los aranceles, bueno es que habría retirada de depósitos, es que mucho cliente español se llevaría su dinero.
El trasiego de empresas que van dejando Cataluña.
Pero también se produciría su salida inmediata de la Unión Europea.
Es que Cataluña quedaría fuera. Es un efecto inmediato de la Unión Europea.
Los expertos piensan que la situación se ha enconado tanto que el domingo primero de octubre y en días sucesivos podría haber violencia, desde el momento en que las Fuerzas de Seguridad del Estado retiren las urnas.
La situación es extremadamente delicada ya lo he dicho y extremadamente grave. En cualquier momento se puede generar una explosión social.
Jamás en toda la historia reciente de la democracia, el Estado español tuvo tanta inestabilidad. Se sabe cómo ha empezado, pero no como terminará este enfrentamiento entre Cataluña y el Estado Español.
Con información de Alberto Peláez
AAE
