A lo largo de la historia de la humanidad ha existido un prejuicio en contra de reconocer los logros de las mujeres científicas, a diferencia de sus colegas masculinos. A este fenómeno se le llama efecto Matilda, un término acuñado en 1993 por la historiadora de la ciencia Margaret W. Rossiter.
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Las consecuencias del efecto Matilda están ampliamente documentadas. Con un análisis de más de mil publicaciones de investigación entre 1991 y 2005, se demostró que los científicos hombres citan más a menudo las publicaciones de autores masculinos que de mujeres.
Asimismo, se ha demostrado en Países Bajos, Italia, Estados Unidos y España que el sexo de los científicos influye en la evaluación que se hace de ellos.
Por años se le había negado el Premio Nobel a las mujeres por motivos poco claros. Ejemplo de ello es el caso Frieda Robscheit-Robbins. En 1934, el Nobel de Medicina fue otorgado a George Whipple, George Richards Minot y William P. Murphy, sin embargo, Robscheit-Robbins, compañera de trabajo de los científicos fue excluida de esta condecoración. Por lo que Whipple compartió el dinero del premio con ella, ya que era coautora de casi todas las publicaciones de Whipple.
Incluso la científica más emblemática de la historia, Marie Curie, por poco también fue víctima del efecto Matilda. Recibió el Premio Nobel de Física solo por la insistencia de un miembro del Comité del Premio Nobel que abogaba por las mujeres científicas, el matemático sueco Magnus Goesta Mittag-Leffler.
El efecto Matilda tiene su antecedente dentro de la comunidad científica con el efecto Mateo, por el cual un científico eminente a menudo obtiene más crédito que un investigador comparativamente desconocido, incluso si su trabajo es compartido o similar.
No More Matildas
Para combatir el efecto Matilda, la Asociación de Mujeres Investigadoras y Tecnólogas (AMIT) de España lanzó en redes sociales la campaña #NoMoreMatildas, que visibiliza las discriminación que sufren las científicas aún actualmente.
Me sumo a la campaña #NoMoreMatildas: Lise Meitner, Marie Lavoisier, Rosalind Franklin y por poco Marie Curie son 'Matildas' reconocidas de la historia. Científicas a las que robaron los éxitos de sus descubrimientos para dárselos a sus compañeros
#DíaDeLaMujerYLaNiñaEnLaCiencia pic.twitter.com/uJBZNPY9qs— Carla E. Valero (@CarlaEValero00) February 11, 2021
