Científicos españoles realizaron el hallazgo de tres nuevos planetas orbitando una estrella cercana a la Tierra y se cree que en uno de ellos podría existir vida.
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Los primeros en tener un avistamiento de estos cuerpos fueron los miembros de la misión TESS de la NASA, coordinados por el Instituto Tecnológico de Massachusetts, quienes tuvieron indicios de un planeta orbitando la estrella GJ 357, catalogada en el tipo de las enanas rojas.
Recreación del nuevo sistema solar por la NASA y TESS. (NASA/TESS Media Office)
A ellos le siguió un equipo internacional de astrónomos conformados por los mejores profesionales a cargo de científicos españoles. Éstos encontraron otros dos planetas cerca de la GJ 357.
En general, estas estrellas son mucho más viejas que el Sol, algunas son casi tan antiguas como el universo, por lo que teóricamente ha habido varios miles de millones de años más para que haya podido surgir la vida.”, mencionó Enric Pallé, astrofísico del Instituto de Astrofísica de Canarias (IAC).
El astrofísico cordobés, Rafael Luque, que a sus 26 años lidera al equipo de 70 astrónomos que hicieron el hallazgo, explica que en cada enana roja hay por lo menos dos planetas orbitando en las cercanías, por lo que descubrir estos mundos depende de la altura de nuestra tecnología.
Así luciría el planeta b, el más cercano a la GJ 357. (NASA)
¿Cómo lo hizo la NASA?
El equipo TESS realiza ocultaciones periódicas de la luz de las estrellas para localizar nuevos cuerpos físicos y planetas. A este proceso se le llama Tránsito, pero antes de dar la noticia se necesita confirmar la información.
Para determinar que se descubrió o no un nuevo planeta, es necesario registrar su gravedad, que atrae y mueve ligeramente a la estrella causando cambios en el color de la luz que emite.
Los telescopios terrestres pueden medir estas tonalidades y dar el veredicto final.
Reconstrucción de los planetas cercanos a la GJ 357 NASA. (Video/NASA)
GJ 357 d, el planeta que podría albergar vida
El GJ 357 d es 22% más grande que la Tierra y recibe casi tanta energía de su estrella como Marte lo hace del Sol.
Por si fuera poco, en caso de que fuera un planeta rocoso y albergara una atmósfera densa, se cree que podría tener agua fluyendo en su superficie.
A tan solo 31 años luz de nuestro Sol, este trío de planetas sería uno de los mayores descubrimientos del Universo.
El gran objetivo que perseguimos los astrónomos es buscar en una atmósfera el desequilibrio químico y termodinámico entre distintos elementos que solo pueda explicarse por la presencia de vida, como sucede en la Tierra con las proporciones de metano, oxígeno y agua, y este planeta puede ser un candidato para hacerlo”, puntualizó Pallé.
