Las razones por las que algunos odian la catsup, uno de los condimentos de tomate más populares en todo el mundo.
La catsup o kétchup, se ha convertido en un condimento casi omnipresente en las mesas del mundo.
Hay quienes la disfrutan con papas fritas o incluso quienes se atreven a mezclarla con huevos revueltos o fritos.
Sin importar cómo se consuma o lo popular que sea (junto a la mostaza o la mayonesa), la catsup no es universalmente querida, ya que hay miles de personas a las que este condimento no les parece apetecible en absoluto.
En varios foros de internet descubrimos algunas de las razones principales por las que algunas personas odian la catsup.
Tiene mucha azúcar
No obstante que este condimento es considerado “salado”, la cantidad de azúcar que viene en una cucharada de catsup es incluso superior a la de muchos postres.
La gran cantidad de químicos que contiene
Los procesos industriales por los que la catsup de botella suele pasar, usa una gran cantidad de químicos que reemplazan los ingredientes de la receta original: vinagre, agua, sal, azúcar y puré de jitomate.
Su sabor eclipsa todos los demás
Para muchas personas, el sabor de la catsup es demasiado invasivo como para permitirle a otros alimentos brillar por su sazón.
Quienes odian este condimento, lo hacen, en parte, por esta razón.
La textura
Tal vez la mayonesa tenga una textura cremosa o la mostaza algo espesa, pero la catsup, para muchas personas, no es ni una ni otra.
Algunas marcas de catsup suelen hacerla una pasta de textura poco constante que en algunas ocasiones es más jugosa que en otras, y eso no les gusta.
El olor
Para cierto grupo de personas, el aroma que despide la catsup al ser sacada de una botella de plástico, es suficiente para perder el apetito.
