Ari Nagel se ha convertido en una especie de celebridad alrededor del mundo debido al gran número de hijos que tiene y que crece de forma constante: en un inseminador profesional. Esta es su historia.
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Como profesionista, Nagel es un profesor de matemáticas que ejerce en la ciudad de Nueva York; sin embargo, desde hace años en todo el mundo, este hombre es reconocido por tener varios hijos, con distintas mujeres y así poder generar dinero.
El “sperminator” o “esperminador”, como es reconocido en el mundo, comenzó en esta labor en 2008, con el objetivo de ayudar a una chica y a partir de ahí inició la cuenta de hijos nacidos gracias a su esperma que hasta el momento se encuentra en 85 y que, indudablemente, crecerá con el paso de los meses pues más mujeres están embarazadas de él.
Nagel es hijo de una familia judía ortodoxa que no está orgulloso de su actividad. Él, por su parte, enseña en la universidad y, por extraño que pueda parecer, se mantiene en contacto con sus hijos, ya sea en persona (las madres cubren gastos de viaje) o de manera remota. Por supuesto, también sigue donando su esperma.
“Mi corazón me dice que continúe. Sé y siento que hago lo correcto. Si lo que hiciera estuviera mal, no se sentiría tan bien.
“En agosto de 2018 una mamá afroamericana dio a luz a un bebé mío en la cárcel, días después nació uno en Taiwán y otros dos en Israel: todos tienen la misma edad y yo soy el padre, pero uno es negro, otro chino y dos blancos. Uno es católico, otro budista y otros judíos. Cada uno en un continente distinto”, aseguró el hombre en declaraciones recuperadas por el medio El Clarín.
Y hablando de Israel, ahí es donde a Ari Nagel se le ha prohibido seguir donando su esperma. De acuerdo a la ley del país, las mujeres solo puedes usar esperma donado si se hace de forma anónima y hay un límite en la cantidad de donaciones que se pueden hacer, reportó AP en 2018.
Por la cantidad de hijos, algunas personas podrían pensar que todos fueron vía inseminación artificial; sin embargo, se ha reportado que con algunas mujeres Nagel ha tenido relaciones sexuales, lo cual no ha sido sencillo para su pareja.
“No me gusta mucho lo que hace Nagel, pero nos permite una buena entrada de dinero“, reconoció la mujer, confirmando que el hombre cobra por inseminación a la que ayuda e incluso cuando tiene sexo con las mujeres, por lo que también ha sido todo un negocio para él.
