El estudio, que había sido ordenado durante la administración de Barack Obama, apuntaba a investigar la hipótesis de que los residentes de zonas de extracción de carbón están expuestos a ciertos riesgos para la salud.
El argumento de la Casa Blanca para poner fin al estudio es la necesidad de no malgastar el dinero de los contribuyentes.
El presidente Donald Trump prometió generar miles de empleos, especialmente en el área de la minera del carbón. Apuntando a eso, en marzo de este año, firmó una orden ejecutiva para desmantelar la política de medioambiente de su predecesor y desregular el sector.
Sin embargo, la minería del carbón se vio afectada por una disminución de la demanda y una presión sobre los precios en los mercados mundiales.
FJMM
