Esta señora es una seguidora de Trump que, sin saberlo, ayudó en una operación vinculada con el Kremlin (el gobierno ruso) para inmiscuirse en la política estadounidense. En entrevista para CNN, aseguró que no tenía idea de eso y que, según ella, toda la gente involucrada eran estadounidenses:
Por otro lado, los rusos le pagaron a Harry Miller, otro seguidor, hasta 1000 dólares para que construyera una jaula a la que le metió a una persona vestida como Hillary Clinton para participar en una manifestación en West Palm Beach, Florida, en agosto de 2016.
Esta es una de las muchas acciones que, según una investigación federal estadounidense, realizaba un grupo especializado que tenía el control desde San Petersburgo, Rusia. La Agencia de Investigación de Internet (como se le conoce) es un grupo que fue diseñado para socavar el sistema político estadounidense.
A principios de agosto de 2016, la Agencia de Investigación de Internet comenzó a contactar a partidarios de Trump en Florida para organizar un flash mob que denominó “Florida Goes Trump”. Un flash mob es una acción multitudinaria que varios individuos coordinan para realizarla en un lugar público y luego dispersarla rápidamente.
Para organizarse, el grupo usó una página de Facebook llamada “Ser patriótico” que fue creada para que aparentara ser dirigida por estadounidenses reales. También fueron creadas cuentas de Instagram y de Twitter.
Las personas de “Ser patriótico” se acercaron a Miller, un partidario entusiasta, para que construyera la jaula y, según CNN, se le pagó entre 500 y 1000 dólares para cubrir el costo de los materiales.
El seguidor de Trump aseguró a CNN que tuvo varias llamadas telefónicas con personas del grupo y notó que uno de los hombres con los que hablaba no dominaba bien el inglés.
Miller dijo:
“Ni una pista [de que eran del gobierno ruso]. ¿Qué pensarías? Un hombre te llama y hablas con él y creas una relación durante un periodo de tiempo, eres amable con él porque entiendes que tiene un dialecto un poco difícil de entender, pero crees que podría ser un migrante que vive aquí”
Añadió:
“Tenía ese hermoso sitio web, eran un gran apoyo para el candidato [Trump] y no había nada, nada en absoluto que nos hiciera pensar que fueran otra cosa que personas que intentaban apoyar a [nuestro] candidato”
Meses después. Miller se mudó a Pennsylvania y eñ FBI llegó a su puerta.
Parece que los rusos estaban contentos con lo que sucedió en West Palm Beach ya que le habían ofrecido a Miller pagarle para que viajara a Nueva York con su jaula y participara en otro evento. Él se rehusó, no así la mujer que se vistió de Hillary Clinton pues ella sí fue a Nueva York para una manifestación que se realizó en septiembre de ese año. El martes pasado, la mujer aseguró a CNN que no estaba disponible para hablar con ellos.
Miller no fue el único simpatizante de Trump que fue cooptado por los rusos para el flash mob “Florida Goes Trump”.
(Imagen tomada de Facebook por CNN Money)
Por otro lado, Florine Gruen Goldfarb dirige la página de Facebook del equipo Trump Broward que publicó sobre varios eventos que fueron promovidos por los rusos. Ella declaró a CNN que no sabía que los rusos estuvieran detrás y aseguró que creía que todas estas acusaciones eran para distraer a la gente de la matanza realizada en Florida por un adolescente supremacista blanco.
Lee también:
Abogado vinculado a la campaña de Trump se declara culpable de mentir al FBI
Goldfarb no es la única persona que piensa esto. Una corriente de pensamiento de derecha (que llega hasta Trump mismo) está tratando de ocultar la investigación sobre la ingerencia rusa acusando al FBI de no preocuparse por evitar tiroteos.
El propio Trump tuiteó:
“Es muy triste que el FBI haya omitido todas las señales enviadas por el tirador de la escuela de Florida. Esto no es aceptable. Están gastando demasiado tiempo tratando de demostrar la colusión rusa”
Lee también:
Chico latino se vuelve héroe al ponerse como escudo humano y salvar la vida de sus compañeros
Las tácticas de los rusos no creaban nuevos simpatizantes sino que impulsaban a los ya existentes. Es por eso que los simpatizantes creen que los rusos no tienen nada que ver.
Pero no solo se dedicaron a engañar a los partidarios de Trump, la Agencia de Investigación de Internet del Kremlin también se inmiscuyó en grupos de activistas Black Lives Matter y grupos de musulmanes.
Incluso Micah White, cofundador del movimiento Occupy Wall Street, fue objetivo de esta agencia rusa.
El activista dijo a CNN:
“Si es verdad que un grupo activista con base en Rusia es indistinguible de un grupo activista creado por estadounidenses, eso tendría un impacto negativo en nuestra capacidad de crear movimientos sociales positivos, que en realidad nos beneficien a nosotros mismos y no a alguna potencia extranjera”
