CONFLICTOS ARMADOS

Violentos combates en Karabaj tras bombardeos sobre la capital

Muchas potencias, como Rusia, Turquía o Irán, tienen intereses en esta zona del sur del Cáucaso

Armenios y azerbaiyanos libraron violentos combates en la mayor parte del frente en Nagorno Karabaj, y las autoridades de Ereván aseguraron que las fuerzas separatistas habían rechazado un “ataque masivo” de Bakú.

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El presidente de este territorio separatista, Arayik Harutyunian, vestido con uniforme militar, declaró a los periodistas que había comenzado “la última batalla” por Nagorno Karabaj, añadiendo que se unía al frente para combatir junto a sus tropas.

El ejército separatista “logró detener el ataque masivo del enemigo”, indicó la portavoz del ministerio de Defensa, Shushan Stepanian, en su página de Facebook, a la vez que mencionó “intensos combates” y que “las fuerzas armenias contraatacaron en uno de los sectores del frente”.

En un discurso a la nación, el primer ministro armenio, Nikol Pachinian, dijo que Armenia se enfrenta al “momento quizás más decisivo de su historia”.

Una “oración nacional por Nagorno Karabaj y sus defensores” se realizó en la noche en las iglesias de Armenia y su diáspora.

“En la capital de Karabaj, Stepanakert, blanco por primera vez de disparos de artillería el viernes, se oyeron explosiones el sábado por la mañana”, constató un corresponsal de la AFP.

Nagorno Karabaj, territorio azerbaiyano poblado mayoritariamente por armenios, se independizó de Azerbaiyán en 1991, provocando una guerra que se cobró 30 mil vidas.

“El enemigo desplegó tropas reforzadas. Nuestros soldados muestran una resistencia heroica”, declaró en Facebook el portavoz del ejército armenio, Artsrun Hovhannisyan.

Arayik Harutyunian declaró en el mismo tono a los periodistas que “la nación y la madre patria están en peligro”.

Por su parte, el presidente azerbaiyano, Ilham Aliyev, reiteró su llamado a la retirada de las fuerzas armenias de los “territorios ocupados” azerbaiyanos como “condición previa” a un alto el fuego.

“Vamos a recuperar nuestros territorios, es nuestro derecho legítimo y nuestro objetivo histórico”, declaró en una entrevista con la cadena de televisión Al Jazeera.

“No podemos esperar 30 años más 1/8… 3/8 El conflicto de Karabaj debe solucionarse ahora”, subrayó.

El ejército azerbaiyano afirmó que 19 pueblos azerbaiyanos fueron el blanco de disparos armenios por la noche y aseguró que había tomado “medidas firmes de represalia”, reivindicando en especial la toma de posiciones separatistas.

Las autoridades armenias anunciaron el sábado la muerte de otros 51 soldados separatistas, por lo que el balance, muy parcial, desde el inicio de las hostilidades el pasado domingo se eleva a 242 muertos: 209 soldados de Karabaj, 14 civiles armenios, y 19 civiles azerbaiyanos. Bakú no comunica sus pérdidas.

Cada bando reivindica sin embargo éxitos desmentidos por el otro y da cuenta de la muerte de cientos de soldados enemigos cada día. Los armenios aseguran que más de 3 mil soldados azerbaiyanos murieron desde el domingo, mientras Bakú afirma haber matado a 2.300 militares armenios.

Como país vecino de Armenia y Azerbaiyán, Irán advirtió el sábado contra cualquier “intrusión” en su territorio, después de que los morteros golpearan aldeas iraníes a lo largo de la frontera.

Georgia, otro país del Cáucaso, suspendió temporalmente el sobrevuelo en su territorio de los aviones militares de carga de Armenia y Azerbaiyán.

Las dos partes en conflicto ignoran por el momento los múltiples llamados de la comunidad internacional a un alto el fuego, como el del viernes del secretario general de la ONU, Antonio Guterres, que reclamó “un fin inmediato de las hostilidades”.

Rusia, Estados Unidos y Francia, los tres países implicados en la mediación en este conflicto, reclamaron igualmente, en vano, un alto el fuego.

Muchas potencias, como Rusia, Turquía o Irán, tienen intereses en esta zona del sur del Cáucaso.

Otro de los asuntos de preocupación es el supuesto envío de combatientes proturcos, especialmente sirios, al frente, en apoyo de Azerbiayán, que es apoyado por Turquía.

Sin nombrar directamente a Turquía, el presidente ruso Vladimir Putin expresó por primera vez su “profunda preocupación” al respecto durante una conversación con el primer ministro armenio, Nikol Pashinyan.

Francia afirmó con anterioridad que 300 combatientes “yihadistas” salieron de Siria en dirección a Azerbaiyán, pasando por Turquía, lo que constituye una “línea roja”.

El Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH) indicó que al menos 64 combatientes sirios proturcos han muerto en Nagorno Karabaj desde el inicio de los enfrentamientos.

Con información de AFP
DGP