DEBATES Y ENTREVISTAS

Video: El ocaso de Emilio Lozoya; análisis de su detención, en Tercer Grado

Emilio Lozoya se encuentra en la cárcel después de que se consideró necesaria la prisión preventiva justificada dado el peligro de fuga que podría representar el hecho de que permaneciera en libertad.

  • Los analistas reconocieron que se trata del caso de corrupción más importante para la Cuarta Transformación y para el presidente López Obrador.

En Tercer Grado, los periodistas hablaron sobre el caso de Emilio Lozoya y la orden de prisión preventiva justificada girada por un juez; también se abordó el tema de los aspirantes a la sucesión presidencial.

Como bien se sabe, lo que debió haber ocurrido desde el 28 de julio de 2020 sucedió este miércoles 3 de noviembre: Emilio Lozoya se encuentra en la cárcel después de que se consideró necesaria la prisión preventiva justificada dado el peligro de fuga que podría representar el hecho de que permaneciera en libertad.

Los analistas señalaron que se trata del costo de una cena.

“Que caro le salió a Emilio Lozoya la frivolidad de irse a cenar al Hunan, cuando es un corrupto confeso”, apuntó Denise Maerker.

Expusieron que todo empezó a desarrollarse con un guión en el que se vio a Lozoya presentarse a declarar y después el desarrolló de la audiencia. Primero sí le concede el juez a sus abogados que se le difiera a un mes más el momento de presentar toda una serie de pruebas, pero después la Fiscalía General de la República da el giro y  pide que se le de prisión preventiva porque hay temor de que se fugue y porque descubrieron que tiene dinero para hacerlo.

Recordaron que la Fiscalía fue humillada y la forma en la que se trató el tema del restaurante que también afectó al presidente López Obrador, quien dijo “no es ilegal, pero es inmoral”.

Finalmente se les acabó la paciencia. Se le acabó la paciencia al presidente con el fiscal y al fiscal con su “testigo protegido colaborador”, que no aportó las pruebas que había prometido y ahora esta en la cárcel.

“Sin la cena, esto no hubiera ocurrido”, enfatizaron.   

También que el juez dijo, que no fue con motivo de su exhibición en el restaurante, sino que él, desde el 28 de julio del año pasado, consideraba que había condiciones y elementos  para otorgar la prisión justificada dado el riesgo de fuga.

Reconocieron que fue bueno que sucediera la detención de Lozoya.

De que había riesgo de fuga, por supuesto. El exdirector de Pemex cuenta con departamentos en Suiza, Alemania,  además de cuentas millonarias y amigos que podrían ayudarlo.

“Tenía los elementos para poderse fugar en cualquier momento”, subrayó Genaro Lozano.

Agregaron que sería correcto ver un juicio donde se respete el debido derecho.

Se trata del caso de corrupción más importante para la Cuarta Transformación y para el presidente López Obrador.

Lo de Lozoya, hoy en la cárcel, es el resultado de la humillación publica a la Fiscalía y decir que no le iba a pasar absolutamente nada.

Después de este arreglo de un año y seis meses, finalmente pisa la cárcel en el Reclusorio Norte.

“Lo que asombra, en este caso, es que hasta ahora esté en la prisión”, destacaron.

La Fiscalía trató de obtener información de él y hubo un momento en el que se convirtió en un lastre político.

Lo que ahora preocupa es que la justicia en México tenga una justificación política y que si alguien es incómodo desde el punto de vista político pasa a la cárcel y si no lo es puede estar en libertad.

Su pecado, efectivamente fue un pecado de orgullo, el hybris. Pero cuestionaron si no debería preocupar que en el país la aplicación de la justicia sea tan discrecional. En este caso, la Fiscalía cambio su argumento al decir “no esta colaborando con nosotros, no se va a escapar” y el juez le dio la razón.

Es una prisión justificada, no es una prisión oficiosa. En su caso, es confeso y no ha sido juzgado.

Expusieron que Lozoya terminó timando a muchos, porque su trato privilegiado derivaba en tenerlo como testigo colaborador que señalaría a superiores o iguales. Algo que no sucedió y la Fiscalía quedó como la engañada. Es en ese sentido que le imponen la prisión preventiva justificada.

Habrá entonces, efectos judiciales y políticos colaterales sobre la base de quienes han sido señalados y los que están prófugos

El hecho de que Lozoya esté en prisión no le niega la posibilidad de pedir el criterio de oportunidad. El caso sigue abierto. Fueron 16 meses en los que no probó nada, ha dicho demasiadas mentiras y no parecería tener algo para mostrar en su defensa.

Lo que hizo la Fiscalía fue un recorte de sus pérdidas, coincidieron los analistas, y tendrá un peso político.

Sucesión presidencial

Hace 4 meses, el pasado 5 de julio, el presidente López Obrador dio el banderazo de salida para la sucesión presidencial. El juego se ha desbocado. Los últimos días han sido bastante por lo menos de parte de tres aspirantes, Claudia Sheinbaum, Marcelo Ebrard y Ricardo Monreal.

En este caso fue el propio presidente el que quiso jalar la atención sobre el tema y se le ha visto muy activo reforzando a Sheinbaum después del tropiezo en las elecciones locales. Ebrard estuvo en el G20 y que hizo política de selfies y Monreal diciendo, ellos son los candidatos, pero yo les voy a ganar.

Todo indica que el presidente quiere que Sheinbaum sea la candidata de Morena a la Presidencia y luego presidenta de la República.

Esta edición de Tercer Grado, bajó la conducción de René Delgado, contó con la participación de Denise Maerker, Leo Zuckermann, Raymundo Riva Palacio, Genaro Lozano y Sergio Sarmiento.

Con información de Tercer Grado.

LLH