En Tercer Grado los periodistas hablaron de Morena y el conflicto interno que vive el partido por la renovación de su dirigencia. También analizaron la desaparición de 109 fideicomisos y lo que implica.
Destacaron que el tamaño del conflicto en el partido es del tamaño de los insultos que se han lanzado Porfirio Muñoz Ledo y Mario Delgado, este último, quien se perfila como ganador de una tercera encuesta.
“La clave es qué tanta militancia trae cada uno”, comentaron.
Expusieron que el conflicto refleja una fractura al interior del partido.
“Hay muchos intereses en juego. Es real la división de Morena por intereses y por ideología”, dijeron.
Coincidieron en que estos grupos se pelan por el control del partido y por la candidatura presidencial del 2024, que pasa por las elecciones del 2021.
Subrayaron que Morena es el vehículo principal por el que se puede acceder al poder.
Recordaron que históricamente, esta situación ya la vivió el PRI, donde las presiones fueron fuertes pero desarrolló un sistema sofisticado internamente y las reglas terminaron aceptándose.
Morena, señalaron, carece de un sistema de reglas aceptado por todos. Con los problema que hoy presenta el partido manda el mensaje de que todavía no tiene los instrumentos para poder llegar al poder.
“La diferencia con el PRI es que en su momento sí fue controlado por el presidente”, apuntaron.
Expusieron que es un error del presidente López Obrador dejar al partido abandonado y que debería de intervenir.
También recordaron que al presidente no le gustan los partidos políticos, que sí en cambio le gustan los movimientos sociales y que por esa razón ha amenazado con dejar a Morena si no se ponen de acuerdo.
“Morena es un moviendo al servicio de un líder carismático. Quien tiene todas las riendas del partido es López Obrador”, anotaron.
FIDEICOMISOS
Sobre la desaparición de los 109 fideicomisos expusieron que en algunos casos se justifica y en otros no.
Señalaron que la urgencia de la Cuarta Transformación por desaparecerlos envía un mal mensaje.
Cuestionaron a dónde va a ir ese dinero, si a la atención al COVID-19, a los programas sociales o al gasto corriente.
Apuntaron que los fideicomisos tienen sus ventajas.
Destacaron que con la eliminación de los fideicomisos pareciera que el presidente quisiera concentrar todo el poder y todo el dinero, y quiere ser él quien le entregue el dinero al cineasta o al investigador, porque así obtiene alianzas políticas.
Lamentaron esta política de acabar con todos los fideicomisos sin distinguir los que si funcionan y que ello termine dañando trabajos tan importantes, como los de investigación científica.
Esta edición de Tercer Grado, bajo la conducción de Leopoldo Gómez, se realizó vía remota y contó con la participación de Denise Maerker, René Delgado, Raymundo Riva Palacio, Leo Zuckermann, Genaro Lozano y Sergio Sarmiento.
Con información de Tercer Grado.
LLH
