CRIMEN Y SEGURIDAD

Vicepresidenta de Nicaragua llama ‘terroristas’ a opositores

Familiares despidieron a Gerald Vásquez, estudiante de la Universidad Nacional Autónoma de Nicaragua que falleció el fin de semana cuando paramilitares atacaron a un grupo de personas refugiadas en la iglesia de Managua.

Gerald tenía 20 años y estudiaba Técnica en construcción.

El ataque a los estudiantes universitarios, periodistas y clérigos ha sido condenado por la comunidad internacional. Estados Unidos urgió al presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, a acabar “de inmediato” con la represión a las protestas y alentó anticipar las elecciones como salida a la crisis.

La portavoz del Departamento de Estado, Heather Nauert, anunció restricciones adicionales de visados a funcionarios nicaragüenses responsables de violaciones a los derechos humanos.

El secretario general de las Naciones Unidas, Antonio Guterres, pidió el cese inmediato de la violencia y la reanudación del diálogo para la búsqueda de una solución a la crisis política. Calificó de “inaceptable” la cantidad de muertos y el uso de la fuerza en el marco de la crisis sociopolítica.

Este lunes en su mensaje a través de medios oficialistas, la vicepresidenta Rosario Murillo calificó los asesinatos durante las protestas contra su Gobierno como “prácticas diabólicas y satánicos” que son promovidas en redes sociales.

Vamos luchando para vencer, venciendo y bueno vamos también con nuestro corazón sufriente y sufriendo cuando vemos esos crímenes de odio cuando vemos la forma, decíamos, maligna, siniestra, horrenda, satánica en que se expresan los terroristas”, dijo Rosario Murillo, vicepresidenta de Nicaragua.

Se refirió a la muerte del suboficial Gabriel de Jesús Vado Ruiz en Masaya que, según un comunicado de la Policía Nacional, fue secuestrado y torturado, por lo que denominó “grupos terroristas”.

“No pasarán, no pasarán, no han pasado y no pasarán, esa atrocidad no va a gobernar Nicaragua, el terrorismo no va a gobernar Nicaragua, los diabólicos no podrán nunca gobernar Nicaragua”, insistió Murillo.

Dijo que su esposo, Daniel Ortega, apuesta por el diálogo y que son más las familias nicaragüenses las que están del lado del gobierno.

Todos, las familias estamos empeñados en recuperar, en restaurar el bien, la paz, la seguridad, el trabajo la vida, independientemente de esos pocos que siembran guerra y quieren seguir sembrando guerra y odio en el país, independientemente de esa minoría llena de odio que todavía quiere imponer dolor, muerte, dolor, muerte y sucesos increíbles en nuestro país”, agregó la vicepresidenta del país.

Este miércoles la Organización de Estados Americanos, OEA, celebrará un Consejo Permanente para seguir abordando la crisis en Nicaragua y votar una resolución impulsada por siete países de condena a la violencia.

Con información de Ana María Islas

AAE