El Vaticano confirmó hoy que continúa vigente el periodo de excedencia concedido por el papa al cardenal australiano, George Pell, después de que se conociera que la justicia de su país lo enjuiciará, por presunta pederastia.
La Santa Sede toma nota de la decisión de las autoridades judiciales en Australia que tienen que ver con su eminencia, el cardenal George Pell”, subrayó el portavoz vaticano, Greg Burke, en un breve comunicado.
Además, recordó que el año pasado el pontífice concedió a Pell, su prefecto para la Secretaría para la Economía, de 76 años de edad, un periodo de excedencia para poder viajar a Australia y defenderse de las acusaciones.
Esa disposición sigue siendo válida”, zanjó Burke.
La jueza del Tribunal de Melbourne, Belinta Wallington, determinó que existen suficientes evidencias para abrir un juicio formal por presunta pederastia contra el jefe de las finanzas del Vaticano.
Su fallo se da en el marco de un proceso preliminar que comenzó el pasado 5 de marzo por “múltiples” acusaciones de presunto abuso sexual a menores, cuyo número y detalles se desconoce por estar bajo secreto de sumario.
Antes de abandonar el Vaticano, Pell ofreció, el 29 de junio de 2017, una rueda de prensa en la que se declaró “inocente” y aseguró que su voluntad era acudir a Australia para “limpiar” su nombre y regresar a Roma “para trabajar”.
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Pell, máximo representante de la Iglesia católica australiana, es sospechoso de haber abusado sexualmente de menores cuando era sacerdote en la ciudad de Ballarat (1976-80) y cuando fue arzobispo de Melbourne (1996-2001), ambas en el estado de Victoria.
Hasta el momento, se sabe que Pell deberá responder a “múltiples acusaciones de distintos querellantes” de acuerdo con el fallo de Wallington, quien además habría desestimado siete acusaciones vinculadas a un querellante”, informó por su lado el portal de la edición australiana del periódico The Guardian.
El proceso contra el purpurado comenzó después de que declarara en tres ocasiones como testigo en febrero de 2017 ante la Comisión Real que investigó la respuesta de las instituciones públicas y religiosas a los abusos sexuales a menores.
Según la Comisión, la Iglesia católica recibió quejas de cuatro 500 personas por presuntos abusos a menores cometidos por unos mil 880 miembros de la institución, sobre todo sacerdotes, entre 1980 y 2015, aunque algunos casos se remontan a la década de 1920.
Sin embargo, la Comisión no investigó los presuntos casos de pederastia de Pell.
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Con información de EFE.
RMT
