Urgen a Sedena a que resuelva situación en mercado de San Pablito

Ya pasaron dos años de la explosión en el mercado de pirotecnia de San Pablito, en Tultepec, en el Estado de México, donde murieron 42 personas, y aunque se hicieron modificaciones y la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) reforzó su presencia, las autoridades municipales urgieron al Ejército a que se pronuncie antes del 10 de enero sobre si se permitirá la reapertura total de 300 locales que siguen cerrados.

El cliente no tiene la misma confianza de venir a un mercado, a qué se lo lleven en un coche, en una moto a otro lado”, acusó Germán Galicia Cortés, presidente del  mercado de San Pablito.

Locatarios de San Pablito y autoridades municipales en Tultepec aseguran que desde el 10 de octubre cumplieron con los requisitos solicitados por la Sedena para reabrir el mercado de pirotecnia; dicen que la Sedena tiene hasta el 10 de enero de 2019 para entregar la respuesta sobre la reapertura del mercado.

El mercado cumple de sobremanera todos los requisitos que han solicitado las autoridades federales, mientras San Pablito siga cerrado, Tultepec tiene una situación muy difícil”, aseguró Armando Cervantes, presidente municipal de Tultepec.

Antes del estallido de diciembre de 2016, los locales eran de nueve metros cuadrados, es decir, de tres por tres metros. Ahora son de 6.25 metros cuadrados es decir de dos y medio por dos y medio metros. Tenían paredes en común y estaban agrupados en módulos de cuatro locales; ahora tienen paredes independientes y están separados 70 centímetros.

En este proyecto se hicieron dos brechas corta fuego o dos calles de 15 metros de ancho, esto nos permite que no haya una reacción en cadena”, explicó Germán Galicia Cortés, presidente del mercado de San Pablito.

Los clientes aseguran que el hecho de que el mercado no sea reabierto los perjudica.

Ando buscando luz de bengala, unos tres, cuatro paquetes y cohetecillo, unos mil pesos, por ejemplo, no puedes escoger plenamente, ellos ofrecen, los de acá ofrecen y se me hace mala onda porque todos andan tras el billete, tras la comida”, comentó Ricardo Andrés Jaramillo, comprador de cohetes.

 Con información de Francisco Santa Anna

LHE