A los 10 años, Francisco Ventura ha sorprendido con su talento. Vive en una de las zonas más pobres de Comitán, Chiapas, y ya sabe que quiere ser arquitecto.
Este niño tiene una gran habilidad como ayudante de trabajador de la construcción, lo mismo mezcla el cemento, que lo coloca en las paredes, dobla varillas y prepara conexiones eléctricas.
Así es Francisco, quien cuando sonríe no puede disimular los 10 años de edad que tiene, pero lo que muchos no saben es que su mayor virtud es su capacidad académica.
Originario de Comitán, uno de los poblados más pobres de México en el estado de Chiapas, durante las vacaciones de verano, Francisco trabajó junto a su padre para lograr ganar algunos pesos adicionales para ayudar a su familia.
Me siento orgulloso de mi hijo por tener una buena calificación y agradecerle a su maestro que le ha inculcado muchas cosas”, dijo Javier Ventura, padre del estudiante de excelencia.
Francisco cursa la primaria y ha mantenido un promedio de excelencia de 9.7, casi el 10 perfecto. Su historia se viralizó en redes sociales y una universidad privada le regaló útiles y libros para el próximo ciclo escolar.
Es tanto el potencial escolar que tiene Francisco que una universidad le ofreció una beca completa para cuando realice sus estudios colegiales.
A mi hijo lo que le deseo es que siga adelante, que le eche ganas y que sus sueños un día se hagan realidad”, comentó el padre del niño.
Con información de En Punto
LHE
