CONFLICTOS ARMADOS

Unicef: Niños en Siria experimentaron sufrimiento sin precedentes en 2016

Los menores de edad en Siria experimentaron en 2016 un nivel de sufrimiento sin precedentes en el marco de la guerra civil que se ha extendido ya durante seis años, de acuerdo con un informe publicado por el Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (Unicef).

El informe destacó que los casos verificados de asesinatos, mutilaciones y reclutamiento de niños aumentaron considerablemente el año pasado en una drástica escalada de la violencia en todo el país.

Titulado “Tocando fondo: el sufrimiento de los niños en Siria en su peor momento”, el documento resaltó que por lo menos 652 niños murieron en 2016, lo que representa un aumento de 20 por ciento desde 2015. Unos 255 niños fueron asesinados en o cerca de una escuela.

La cifra de niños muertos en 2016 en el marco del conflicto lo ubican como el peor año para los menores en términos de violencia fatal desde que Unicef comenzará en 2014 la verificación formal de las víctimas menores de edad en Siria.

Asimismo, más de 850 niños fueron reclutados para luchar en el conflicto, o más del doble del número reclutado en 2015.

Unicef señaló que los niños están siendo utilizados y reclutados para luchar directamente en el frente y están participando cada vez más en roles de combate, incluso en casos extremos como ejecutores, atacantes suicidas o guardias de prisiones.

Se registraron además en 2016 al menos 338 ataques contra hospitales y personal médico, de acuerdo con el informe.

“La profundidad del sufrimiento no tiene precedentes. Millones de niños y niñas en Siria sufren ataques diarios y sus vidas son trastornadas por completo, dijo Geert Cappelaere, director regional de Unicef para el Medio Oriente y el Norte de frica.

Añadió que “todos y cada uno de los niños tiene cicatrices de por vida con terribles consecuencias sobre su salud, bienestar y futuro.

Los desafíos en el acceso en varias partes de Siria obstaculizan la evaluación completa del sufrimiento de los menores de edad y de la asistencia humanitaria urgente a las niñas y niños más vulnerables, precisó el organismo.

Más allá de las bombas, las balas y las explosiones, los menores están muriendo en silencio a menudo de enfermedades que de otra manera podrían prevenirse con facilidad. El acceso a la atención médica, los suministros que salvan vidas y otros servicios básicos sigue siendo difícil.

Unicef puntualizó que los más vulnerables entre los niños de Siria son los 2.8 millones en las zonas de difícil acceso, incluidos 280 mil niños que viven bajo sitio, casi completamente aislados de la ayuda humanitaria.

Después de seis años de guerra, casi seis millones de menores de edad dependen ahora de la asistencia humanitaria, un alza de 12 veces desde 2012. Millones de niños han sido desplazados, algunos hasta siete veces.

Actualmente más de 2.3 millones viven como refugiados en Turquía, Líbano, Jordania, Egipto e Irak, de acuerdo con la ONU.

Dentro de Siria y fuera de sus fronteras, los mecanismos para hacer frente a estas condiciones está presionando a las familias a tomar medidas extremas sólo para sobrevivir, empujando a menudo a los niños al matrimonio temprano y al trabajo infantil.

En más de dos tercios de los hogares, los menores están trabajando para mantener a sus familias, algunos en condiciones extremadamente duras, incluso para los adultos, de acuerdo con Unicef.

“Seguimos siendo testigos del valor de los hijos de Siria. Muchos han cruzado las fronteras sólo para tomar los exámenes escolares. Insisten en aprender, incluso en escuelas subterráneas. Hay mucho más que podemos y debemos hacer para cambiar su situación, afirmó Cappelaere.

LSH