“He tenido que aguantar las noticias falsas desde el día que anuncié que competiría por la Presidencia. Ahora tengo que aguantar un libro falso, escrito por un autor totalmente desacreditado.
Ronald Reagan tuvo el mismo problema y lo manejó muy bien. ¡Yo haré lo mismo!”, escribió Trump en su cuenta de Twitter.
Tanto Trump como sus portavoces llevan toda la semana atacando duramente al autor y a su libro, que ha reabierto en Estados Unidos el debate sobre la salud mental del presidente y su capacidad para estar al frente de la Casa Blanca.
Uno de sus asesores más cercanos, Stephen Miller, volvió hoy a la carga en una combativa entrevista en CNN que terminó con el presentador Jake Tapper cortándola abruptamente ante la beligerancia con la que respondía y su insistencia en presentar a Trump como “un genio político”.
Ayer el presidente revolucionó Twitter y las tertulias políticas al entrar de lleno en el debate sobre su salud mental e inteligencia definiéndose como “un genio muy estable” y “realmente listo”.
“Es trágico y desafortunado que Steve haga estos comentarios grotescos tan alejados de la realidad y obviamente tan vengativos”, dijo Miller, para subrayar que el papel de Bannon en la Casa Blanca “se ha exagerado mucho”.
Trump volvió a Washington tras sus reuniones en el retiro presidencial de Camp David (Maryland), donde le acompañaron legisladores destacados y parte de su gabinete, con la gran ausencia del fiscal general, Jeff Sessions, al que varios republicanos en el Congreso piden que renuncie por su recusación en la investigación de la trama rusa.
No obstante, Trump aseguró ayer en una rueda de prensa que Sessions tiene su apoyo, tras ser preguntado al respecto, y explicó en Twitter que las reuniones con su equipo han sido provechosas y han incluido temas como “la seguridad fronteriza, el desesperadamente necesitado muro, el creciente problema de los opiáceos y drogas, infraestructuras, defensa, presupuesto, comercio y DACA”.
Con información de EFE.
RAMG