Trump y Erdogan conversaron “sobre varios temas, incluyendo maneras de resolver la actual disputa entre Catar y sus vecinos árabes y del Golfo, asegurando que todos los países trabajan para detener la financiación terrorista y combatir la ideología extremista”, detalló el portavoz de la Casa Blanca, Sean Spicer.
“El presidente Trump enfatizó la importancia de que nuestros aliados y socios aumenten sus esfuerzos para combatir el terrorismo y el extremismo en todas sus formas”, detalló Spicer en un breve comunicado.
El Gobierno de Estados Unidos ya urgió la semana pasada a Catar y a los cuatro países árabes enfrentados con esta nación, Arabia Saudí, Egipto, Baréin y los Emiratos Árabes Unidos (EAU), a alcanzar una solución para poner fin a la disputa diplomática en la que están envueltos desde el pasado 5 de junio.
Los países árabes que encabezan esa crisis con Catar le enviaron la pasada semana a Doha una lista de demandas.
La lista incluye trece demandas, entre las que destaca la clausura del canal catarí Al Yazira, el fin de las relaciones diplomáticas con Irán y el cierre de una base militar turca en el emirato, condiciones que deben cumplirse en un plazo de 10 días, es decir, antes del 4 de julio.
Turquía ha criticado esas exigencias, especialmente la petición de cerrar la base militar turca, cuyo establecimiento en Catar acordaron los dos países en abril de 2016.
Erdogan llegó a decir el pasado 25 de junio que la lista de trece exigencias es contraria al derecho internacional y consideró que pedir el cierre de la base militar es una “falta de respeto” porque,
según dijo: “Si cerramos con un país un acuerdo militar, ¿le pedimos permiso a alguien?”.
Arabia Saudí, Egipto, Baréin y EAU están enfrentados con Catar desde el pasado 5 de junio, cuando anunciaron el cese de relaciones diplomáticas con el pequeño emirato árabe, al que acusan de financiar el terrorismo y socavar la estabilidad de Oriente Medio con su apoyo a Irán, la gran potencia chiíta.
Catar ha negado todas las acusaciones, pero las autoridades del país han afirmado que están abiertas a negociar y no han tomado represalias contra los ciudadanos de los países árabes.
RAMG