El presidente Donald Trump aseguró este jueves que le gustaría aprobar una reforma migratoria, pero consideró que Estados Unidos no está preparado aún para ello.
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Las declaraciones de Trump suponen un cambio de postura, pues poco después de llegar al poder, el 20 de enero pasado, defendió que era “el momento” de impulsar una reforma migratoria para arreglar el sistema de inmigración del país, en el que se calcula que residen 11 millones de indocumentados.
“Es una decisión que tomaré y es una decisión que es muy difícil. Realmente entiendo la situación ahora. Entiendo la situación muy bien”, manifestó el magnate, que desde la campaña electoral ha dedicado declaraciones duras a los inmigrantes.
“Hay dos caras de una historia -añadió-, siempre es difícil”.
Sin embargo, Trump no se pronunció al ser preguntado por el programa de Acción Diferida (DACA), proclamado por el expresidente Barack Obama y que ha evitado la deportación de 750 mil jóvenes indocumentados que llegaron a Estados Unidos siendo niños y son conocidos como “dreamers” (soñadores).
Por el momento, el gobierno no ha tomado una decisión sobre el futuro de ese programa, aunque el presidente ha repetido en ocasiones anteriores que este “es uno de los temas más difíciles” con los que se enfrenta en su Presidencia y que lo encarará “con corazón”, sin dar más detalles.
FJMM