CONFLICTOS ARMADOS

Tres proyectiles de mortero golpean la Zona Verde en Bagdad

Un total de tres proyectiles de mortero impactaron en la Zona Verde, donde se encuentran las sedes del Parlamento, el Gobierno y embajadas occidentales, situada en el centro de Bagdad, sin que por el momento se sepa si se han producido víctimas, informó una fuente policial.

La Oficina de Información de la Comandancia de Operaciones conjuntas iraquí, principal responsable de seguridad en el país, aseveró en un escueto comunicado que cohetes del tipo katiusha impactaron en el lugar y sus alrededores, y que fueron lanzados desde la zona de Al Baladiyat y de la calle Palestina, ubicados en el este de Bagdad.

La Zona Verde ha sido hoy escenario de protestas, convocadas por el influyente clérigo chií Muqtada Al Sadr, y donde un policía ha muerto y otros siete resultaron heridos en enfrentamientos con miles de personas que se manifestaban en dirección a la Zona Verde, informaron una fuente de seguridad y la Comandancia de Operaciones de Bagdad.

Por otro lado, el gobernador de Bagdad, Ali al Tamimi, que pertenece a la corriente opositora de Al Sadr, informó en un comunicado de que “al menos cuatro manifestantes perdieron la vida, después de que la policía lanzó gases lacrimógenos y disparó a los manifestantes”, aunque dicha cifra no ha sido confirmada por las fuerzas de seguridad.

Al Sadr convocó el pasado miércoles a sus seguidores a manifestarse en la plaza Tahrir, en el centro de Bagdad, para pedir la disolución de la comisión electoral, así como reformas políticas.

Tras los enfrentamientos con la policía, el líder chií pidió en un comunicado a los manifestantes que se retiraran de la plaza porque “algunos elementos desconocidos usaron una fuerza exagerada contra los pacíficos manifestantes”, con el fin de “parar la sangre de los inocentes y salvarlos de las manos del terrorismo gubernamental”.

Asimismo, se dirigió al primer ministro iraquí, Haidar al Abadi, asegurando que “él asume la responsabilidad de lo ocurrido”.

Por su parte, tanto el presidente iraquí, Fuad Masum, como Al Abadi, pidieron abrir una investigación “justa” por las bajas humanas en estas manifestaciones.

La Comandancia de Operaciones de Bagdad, responsable de la seguridad en la ciudad, dijo en un comunicado que empezaron los choques “después de que los manifestantes salieran de la zona permitida para llevar a cabo las protestas, y provocaron el enfrentamiento con las fuerzas de seguridad”.

Por otro lado, el comité central para la organización de protestas, formado por la corriente opositora de Al Sadr, y de otros grupos políticos que apoyan estas manifestaciones, señaló que rechazan “politizar la comisión electoral”.

En el discurso, el comité amenazó con hacer una acampada hasta la disolución de la comisión suprema de las elecciones y pidió una reforma electoral.

Al Abadi aseveró a través de su oficina ministerial que todas las personas tienen el derecho a manifestarse, pero que al mismo tiempo tienen que “comprometerse con la ley y el orden público en una época en la que las fuerzas iraquíes combaten” a los yihadistas del grupo Estado Islámico (EI).

Las fuerzas políticas opositoras, sobre todo la corriente liderada por Muqtada al Sadr, han presionado desde hace meses al primer ministro Haidar al Abadi para que lleve a cabo ampliasm reformas políticas para acabar con la corrupción y el sectarismo en el seno de las instituciones, y mejorar la eficiencia del Gobierno.

RAMG