Elba Esther Gordillo, quien se encuentra sujeta a proceso penal por el delito de lavado de dinero, salió de una clínica particular hacia su domicilio.
Durante varias horas del viernes, su abogado defensor, Marco Antonio del Toro, entraba y salía de la clínica.
Alrededor de las 10 de la noche llegó una ambulancia de la Procuraduría General de la República (PGR), una camioneta del Sistema Penitenciario de la Ciudad de México y varios vehículos sin logotipos.
Poco después de la una de la mañana del sábado, su abogado defensor salió para informar que Elba Esther Gordillo se encontraba bien de salud y que después de dos años, se logró que la inculpada obtuviera el beneficio de seguir su proceso penal en domicilio.
“La figura de prisión preventiva domiciliaria tiene por característica, el que mientras se determina el fondo del asunto, es decir, mientras se resuelve sobre la inocencia de la maestra Elba Esther Gordillo deberá de permanecer en su domicilio”, dijo Marco Antonio del Toro.
El abogado negó que se trate de un asunto político.
“Este es un tema absolutamente jurídico, no tiene ningún tipo de connotación del orden político, más allá que se trata de un asunto que nosotros estimamos que no tiene el más mínimo sustento y que, por consiguiente, debe de dar lugar a una resolución de inocencia en su momento”, aseguró Marco Antonio del Toro.
Elba Esther Gordillo continuará proceso legal desde su casa (Getty Images, archivo)
Alrededor de las 2:30 de la mañana y tras 12 horas de diligencias, Elba Esther Gordillo fue sacada en una camilla.
Iba con el cuerpo cubierto con una sábana. Fue subida a la ambulancia.
El convoy compuesto por varios vehículos salió de la clínica que se localiza en el número 500 de la avenida Paseo de las Palmas, en las Lomas de Chapultepec.
El convoy recorrió Paseo de las Palmas, Ferrocarril de Cuernavaca y la calle de Horacio hasta el número 7 de la calle de Galileo, en Polanco.
Después de cuatro años, Elba Esther Gordillo regresaba a su domicilio, que se localiza en el penthouse de este edificio.
Con el rostro y el cuerpo cubierto por una sábana blanca, Elba Esther Gordillo fue bajada de la ambulancia.
Personal de la PGR la subió por la rampa del estacionamiento del edificio y la llevó al elevador para dirigirse al último piso.
En este lugar, Elba Esther Gordillo deberá estar vigilada las 24 horas del día.
Con información de Francisco Santa Anna
RMT/HVI
