CLIMA Y FENóMENOS NATURALES

Tras sismo del 7S, Cascadas de Agua Azul pierden agua

Una roca de nueve metros de longitud que fungía como dique natural en el cauce del río de las Cascadas de Agua Azul en el municipio de Tumbalá, Chiapas, se fracturó por el sismo del pasado 7 de septiembre y causó una oquedad que desvía la corriente del río, provocando una disminución en la caída de las tres cascadas de este centro ecoturístico.

“El sismo provocó que unas rocas se rompieran y cayeran al cauce del río, al margen derecho provocando que el agua sobre el mismo cauce, pero al margen izquierdo, generara un nuevo flujo. Esto disminuye la cantidad de agua sobre las cascadas”, explicó Luis Manuel García Moreno, secretario de Protección Civil de Chiapas.

Los pobladores señalan que la disminución del afluente en las caídas de las cascadas fue gradual hasta provocar una disminución drástica.

“Se desvió el agua para el otro lado, dejó de correr el agua, porque aquí pasaba como a un metro, aquí donde estamos parados”, señaló Jeremías López Hernández, comisariado Ejidal de Cascadas Agua Azul.

“La gente se empezó a dar cuenta como a los cuatro o cinco días después del sismo, está bajando la fuerza del agua, ahí donde siempre llegamos en la comunidad de la entrada”, dijo Manuel Montejo, habitante de Cascadas de Agua Azul.

Las autoridades estatales realizan un estudio integral que llevará 20 días para dictaminar mediante análisis geológico e hidrológico la magnitud de los daños.

Cascadas de Agua Azul en Chiapas se secan. (Noticieros Televisa)

“Las acciones de la Conagua se orientarán a restituir las condiciones anteriores que redujeron el caudal en el brazo derecho del río agua azul afectando a la cascada turística en coordinación con las demás dependencias”, señaló Juan Gabriel Limón Lara, director de Conagua en Chiapas.

Las Cascadas de Agua Azul son el atractivo más emblemático de Chiapas, en la región de la Selva.

Alrededor de 200 mil personas entre nacionales y extranjeros visitan cada año este parque ecoturístico administrado por indígenas.

La disminución del cauce del agua de las Cascadas de Agua Azul permite que turistas y visitantes puedan caminar en lugares en donde el agua alcanzaba hasta los dos metros de profundidad.

Autoridades de la Comisión Nacional del Agua, Comisión de Áreas Naturales Protegidas y de la Secretaría de Protección Civil continúan evaluando los daños y estudian alguna alternativa que permita regresar el cauce del río sin que se afecten los colores turquesa del afluente.

 

Con información de Juan Álvarez Moreno

KAH