Este martes y miércoles en la planta armadora de General Motors, en Silao, Guanajuato, más de seis mil trabajadores están votando si están de acuerdo con su actual contrato colectivo de trabajo. En abril, un primer intento de votación estuvo marcado por irregularidades y tuvo que ser anulado. El nuevo mecanismo que se implementó en esta ocasión es parte de las obligaciones a las que se sujetó México como parte del T-MEC, el Tratado de México, Estados Unidos y Canadá.
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“Mañana entramos a las seis de la tarde a trabajar, a lo mejor podría haber problemas que se aglomere mucha gente”, dijo Alejandro Vargas Martínez, trabajador de General Motors.
A pesar de ser su día de descanso, Alejandro asistió este martes a la armadora de General Motors en Silao Guanajuato, para participar en la votación con la que los trabajadores refrendaran o rechazarán su contrato colectivo. Se trata de la primera elección sindical en el contexto del tratado de libre comercio en la que hay observadores internacionales.
“Voté por él no, porque tenemos un sindicato que, en mis 25 años que tengo aquí, en lugar de ir mejorando va empeorando la cosa. No voy a regalar 25 años de antigüedad a la empresa”, enfatizó Alejandro Vargas Martínez, trabajador de General Motors.
Al igual que Alejandro, Antonio también tiene 25 años en la empresa. Trabaja 12 horas diarias, cuatro veces a la semana. Según el tabulador de sueldos de junio de este año, los trabajadores del complejo Silao ganan entre 184 y 679 pesos diarios.
“Aquí por hora creo que nos pagan un dólar, dos dólares la hora, es muy poco. En Estados Unidos es de 35 dólares la hora, creo y en Canadá pueden llegar hasta 50 dólares, creo. Precisamente el T-MEC creo que es una puerta muy abierta para poder equilibrar los salarios de la industria automotriz. En cuestión de utilidades, nos dan menos de tres centavos de utilidad por unidad. Creo que eso también es injusto”, comentó Antonio Castro Cisneros, trabajador de General Motors.
Seis mil quinientos trabajadores de esta planta de General Motors podrán votar entre hoy y mañana para aprobar su contrato colectivo, y en caso de que gane el no, podrán elegir un nuevo contrato y a una nueva representación sindical, que actualmente detenta la Confederación de Trabajadores de México, la CTM.
“Nosotros vamos a hacer una labor de observación, que las personas que vayan a votar tengan ese derecho, que se instale las mesas receptoras de la votación, que se tengan las papeletas suficientes, que se cuenten bien los votos hasta que haya resultados”, insistió Jaime Juárez Jasso, vocal Ejecutivo del INE en Guanajuato
Además de observadores del Instituto Nacional Electoral y de la Organización Internacional del Trabajo dentro de la empresa, afuera acampan sindicatos opositores que promovieron el no en la votación y un proceso transparente.
“Que el conteo de los votos se haga en forma abierta al final de la votación con la presencia de los observadores de la OIT, del INE y la Secretaría del Trabajo y previsión Social y trabajadores que quieran atestiguarlo”, concluyó Juan Pablo Hernández Lara, de laFederación de Sindicatos de la Industria Automotriz.
Con información de Samuel Adam
KAH
