El sargazo llegó a las playas de Yucatán, afectados por él, los pescadores, pobladores y autoridades implementaron limpiezas para retirar el exceso de algas.
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Saúl es pescador en Progreso, puerto ubicado a 30 minutos al Norte de Mérida, Yucatán.
Todas las mañanas al salir a pescar, se abre camino en la arena para introducir su lancha al mar, el sargazo puede hundirla, por eso no la deja en los puertos de abrigo y lo hace en la costa donde hay menos algas.
“Imagínate pelear con el sargazo, quieres pasar tu pie no puedes, por el peso que tienes que cargar, es como estar en la nieve, hacemos esto, exactamente nosotros vamos abriendo paso, paso”, dijo Saúl.
Los pescadores han implementado estas limpiezas porque de no hacerlo pueden dañar sus motores y equipo de pesca.
“Si se atonta uno puede agarrar el sargazo el motor y son motores, la verdad muy costosos y como no hay pescado un motor en estos tiempos está difícil”, Guillermo May. Pescador.
“Esas lanchas se quedan y las lanchas pequeñas se tienen que sacar, porque, porqué se pueden hundir con el sargazo”, Saúl Pérez. Pescador.
Toneladas de sargazo recalaron a Yucatán, en especial las que van del Puerto de Sisal al de Dzilam de Bravo, una línea de costa de 170 kilómetros.
Este sargazo no es el mismo que llega a las costas de Quintana Roo, que este año han registrado concentraciones masivas.
Según las autoridades de Yucatán, el sargazo que recala en los 330 kilómetros de costas yucatecas es de otra especie, producto del desprendimiento del alga de las profundidades por norte y vientos fuertes.
“En el caso de nuestros vecinos de Quintana Roo es una especie especial “Sargasum” y esta especie es la que arriba y traída por corrientes intercontinentales. Cuando vienen los nortes se desprende cierta cantidad de sargazo y es el que arriba, no es el sargazo que viene de Quintana Roo”, Sayda Rodríguez. Secretaria de desarrollo Sustentable de Yucatán.
Prestadores de servicios, pobladores, pescadores y autoridades extraen el sargazo todos los días, lo recolectan y lo llevan a tiraderos especiales.
“Creo que visualmente no es bonito, además de cuando se acumula pues el aroma tampoco es agradable y no invita a meterse a la playa porque la playa esta hermosa la verdad”, finalizó Catalina Gutiérrez. Testimonio.
En 2020 se recolectaron en Yucatán 85 mil metros cúbicos de sargazo, en lo que va del año aún no hay indicadores del volumen que recaló, pero se estima alrededor de 22 mil metros cúbicos.
Con información de Alejandro Sánchez
DMGS
