ENTRETENIMIENTO Y ESPECTáCULOS

Tobogán de realidad virtual, la atracción favorita en Londres

Desde su inauguración en el 2012, The Shard se ha convertido en una de las construcciones más reconocidas del horizonte londinense.

Y no es para menos. Además de su forma particular, es hoy por hoy el edificio más alto en Europa Occidental, con sus 310 metros y 95 pisos.

Es por eso que cientos de personas visitan cada día su observatorio. Desde aquí, en un día claro, se puede dominar la capital británica en toda su extensión.

La fascinación por The Shard y su altura lo llevó a ganar una encuesta en el 2015, donde se le preguntó a la gente qué sitio del mundo preferirían que tuviera un tobogán.

The Shard quedó en primer lugar, por encima de la Estatua de la Libertad, el Big Ben, la Torre Eiffel o las Pirámides de Egipto.

Pero esa era solo una pregunta y un sueño hipotético que se hizo realidad. Y es que quienes visitan hoy el observatorio del piso 72, pueden además lanzarse en un tobogán a una velocidad vertiginosa, gracias a la realidad virtual.

Tobogán de realidad virtual en Reino Unido. (TheShard.com)

Desarrollado por una firma británica, el visitante se sienta aquí. Se ajusta su cinturón de seguridad. Se coloca su visor. Y se prepara para el viaje de su vida…

Gracias al movimiento del asiento, la sensación de deslizarse es como su nombre lo dice, virtualmente real.

“Por supuesto, no pude resistir probarlo en carne propia, a pesar de no ser fanático de las alturas, debo decir que en secciones me sentí realmente asustado y tuve que asirme al asiento para evitar salir disparado por los aires”, dijo Horacio Rocha.

Imagen virtual del descenso por el tobogán en The Shard. (TheShard.com)

Carly Reed, directora de The View from the Shard, comentó el éxito que ha tenido el tobogán virtual

“La realidad virtual es algo bien popular ahorita. Por eso hicimos caso de lo que dijeron los londinenses. Dijeron que querían echarse en resbaladilla desde lo alto hasta el pie de The Shard. Lo que me parece sensacional es que puedes ver para otros lados con tu visor puesto y puedes ver todos los distintos lugares importantes de Londres. Pues mantuvimos el aspecto del recorrido educativo y además la diversión”, afirmó Carly Reed; directora de The View From the Shard.

Y el tobogán no es la única experiencia de realidad virtual.

En Vértigo, lo único que el visitante hace es intentar caminar en línea recta, pero en su visor, siente que está en el punto más alto del rascacielos cuando apenas estaba siendo construido. A sus lados solo ve el vacío, y es fácil perder el equilibrio.

Vértigo, otra experiencia virtual en el edificio londinense. (TheShard.com)

“Cuando cruzaba la viga y miré para abajo, sentí que me iba a caer y de verdad me entró miedo, pero pude pasar a salvo. Lo bueno fue que me ayudó la gente que trabaja aquí para irme guiando. Si no, definitivamente me hubiera muerto”, narró Aman Menta; 12 años, tras experimentar Vértigo.

Es esa mezcla entre la realidad de estar a más de 300 metros de altura, y el engaño a los sentidos al colocarnos los visores, lo que hace la vista al Shard algo realmente inolvidable. Ajústese su cinturón y no se suelte.

 

Con información de Horacio Rocha Staines

KAH