Los testimonios de pasajeros del vuelo 2431 de Aeroméxico, que se desplomó a pocos minutos de haber despegado en Durango con dirección a la Ciudad de México, han permitido reconstruir el accidente.
Uno de los pasajeros, Ramin Parsa, de origen iraní, difundió un video en redes sociales, en el que se observa la fuerza de la tormenta al momento del despegue.
El pasajero grabó el despegue desde la ventanilla de su asiento y en él se aprecia cuando el avión sufre una sacudida.
Ashley García, otra pasajera, también grabó el momento del accidente e instantes después, el momento en que los pasajeros salen y caminan a metros de la aeronave.
Fueron segundos de terror, fue tan rápido que la verdad no sé cómo explicarlo”, dijo Rubí Rodríguez, pasajera del vuelo 2431.
A las 3:15 de la tarde del martes, el avión Embraer 190 de Aeroméxico, con Matrícula XA-GAL, tomó pista para despegar de Durango hacia la Ciudad de México.
El clima estaba muy feo para despegar, allá en Chicago, con esa lluvia detienen los aviones, nunca hubiera salido ese avión, desde el principio se sentía el avión muy inestable, no se sentía bien desde el principio”, aseguró Jesús Mercado Jaques, otro de los pasajeros.
El avión llevaba 97 pasajeros, dos sobrecargos y dos pilotos a bordo.
Estaba en el avión, todo iba bien, despegó y de repente cayó, empecé a sentir golpes, y de repente paró y yo miré que todos empezaron a correr y yo salí”, relató María Guadalupe Herrera, pasajera del vuelo 2431 de Aeroméxico.
Vicente Ramírez Ponce, quien viajaba cerca de la puerta delantera del avión, en la segunda fila de asientos, aseguró que a las tres de la tarde con 15 minutos cerraron las puertas de la aeronave y el piloto inició la marcha hacia la cabecera de la pista para despegar.
Después, esperó indicaciones de la torre de control y cinco minutos más tarde inició el despegue.
Destacó que en el inicio de la pista no llovía, pero que al final caía un aguacero.
Cuando ya cierran las puertas y se movió el avión para coger pista, para subir, para elevarse, duró cinco minutos muy despacio, yo pienso que caminó casi toda la pista y cuando caminó toda la pista estaba muy fuerte el agua, yo estaba viendo para afuera del avión”, afirmó.
El testimonio de mal tiempo durante el despegue fue confirmado por otros pasajeros.
Estaba lloviendo, no sé qué tan fuerte estaba lloviendo cuando despegamos, pero cuando salimos del avión, estaba horrible, empezó a llover bien feo, con granizo / estaba bien feo y luego de repente paró de llover y se aclaró y ya no llovió”, aseguró Rubí Rodríguez, pasajera del vuelo 2431.
El avión sí alcanzó a elevarse porque yo sentí las ruedas cuando se despegaron del piso, cuando cayó no íbamos muy alto, algunos cinco o seis metros cuando mucho”, dijo Vicente Ramírez Ponce, uno de los pasajeros.
Otro pasajero aseguró que fueron segundos en el aire.
Hasta que se cayó, yo diría que fue medio minuto, por ahí, 30 segundos”, sostuvo.
Cuando empezó a caer, haga de cuenta que hizo como, que brincaba y pegaba hasta que paró”, narró Rubí Rodríguez.
Después, todo fue confusión dentro de la aeronave.
Yo me golpee en el asiento de adelante como tres veces, caminamos por la parte de atrás y salimos, pero ya nos estábamos ahogando con el humo, ya queríamos salir, todos estamos saliendo porque sentíamos que nos estábamos ahogando”, comentó María Guadalupe Herrera, quien viajaba a la Ciudad de México.
Las sobrecargos desalojaron la nave.
Empezaron abrir las puertas de atrás y ya salimos por atrás, pero se llenó toda la cabina de humo, en cuanto abrieron las puertas empezamos a salir, y ya al salir estaba el piso ahí de volada, entonces ya salimos y nos alejamos del avión porque estaba ya quemándose”, recordó el pasajero Jesús Mercado Jaques.
“Todos queríamos salir, vimos las llamas, yo pensé que las llamas estaban adentro, pero no, porque, como vi a todos pararse, es cuando vi que estaba por las ventanas, por donde están las alas”, agregó Rubí Rodríguez, quien viajaba en la aeronave.
Mientras los pasajeros se alejaban del avión, autoridades aeroportuarias, policías federales, paramédicos y elementos del Ejército llegaron y acordonaron la zona.
Fue una experiencia horrible que nunca se lo deseo a nadie, pensé que me iba morir”, aseguró Rubí Rodríguez, pasajera del vuelo 2431 de Aeroméxico.
Con información de Francisco Santa Anna
LHE
