Reciclaje informal, inseguridad y problemas viales. Todo se conjuga en zonas como la colonia Coltongo, de la alcaldía Azcapotzalco, donde banquetas y carriles de circulación vehicular son utilizados como bodegas, talleres y puntos de compraventa de tarimas.
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“El problema que tenemos son las tarimas, que invaden de uno a tres carriles viales, las banquetas y, pues los vendedores, que se acomodan en toldos, ponen salas completas, sillas y se la pasan bebiendo y drogándose durante el día, la noche, y es complicado para nosotros, porque tienen invadido el espacio público, no podemos caminar por la banqueta, sufrimos acoso y hostigamiento por parte de ellos, en especial para las mujeres, la inseguridad ha incrementado”, indicó Guadalupe, vecina colonia Coltongo
Según las autoridades locales, son unas 500 personas las que se dedican a la compra, rehabilitación y venta de las tarimas, en 19 puntos de la alcaldía Azcapotzalco.
Los tarimeros, como se hacen llamar, reconocen que su actividad provoca molestias, pero defienden su labor, como una forma de reciclaje que les permite subsistir.
“Nosotros reparamos, nosotros vendemos y estamos generando fuentes de empleo ¿no? Tengo nueve trabajadores que dependen de mí, todas sus familias. Sabemos que estamos causando un malestar, pero bueno, tratamos de alinearnos nada más, que, la verdad, es imposible, porque haz de cuenta que un día puede no llegarte nada de tarima, pero al otro día te bombardean y pues obviamente es ahí cuando se ve luego mal, ¿no?”, indicó un tarimero.
En un recorrido, las autoridades de Azcapotzalco mostraron los retos que enfrentan por esta situación.
“Viola disposiciones de la ley de cultura cívica, ley de movilidad, también disposiciones ambientales, genera problemas sanitarios, por la acumulación de basura, problemas de seguridad, porque la gente queda entre la pared y una columna de tarimas, en donde fácilmente puede ser asaltada y sin que nadie se dé cuenta, hay problemas de protección civil también y entonces esto rompe normas de convivencia armónica”, refirió Rafael Guarneros, director general de Gobierno de la alcaldía Azcapotzalco.
Por lo pronto, la estrategia de la alcaldía para enfrentar el problema de las tarimas es ir al origen: Están buscando a las empresas que desechan las tarimas y que, en vez de llevarlas a recicladoras legales, las dejan en estos espacios informales.
Además, se está invitando a los tarimeros para que eviten usar la vía pública como espacio de trabajo.
Con información de N+ Marco Dueñas
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