La ministra de Exteriores de Canadá, Chrystia Freeland, calificó de “represalia dólar a dólar” las tarifas que su país impondrá el 1 de julio a Estados Unidos después de los aranceles que la administración de Donald Trump ha impuesto al acero y al aluminio de su país.
Esa acción, dijo, es ilegal bajo las reglas de la Organización Mundial del Comercio y del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN).
La ministra de Exteriores se pronunció así en Washington tras una reunión con el poderoso Comité de Relaciones Exteriores del Senado, en la primera visita de un miembro del gobierno de Justin Trudeau a la capital estadounidense desde el tumultuoso G7 de Canadá.
En el marco de esa reunión, Trump acusó al primer ministro canadiense de haber hecho afirmaciones falsas sobre aranceles en una rueda de prensa y uno de los asesores económicos del mandatario republicano dijo que “hay un lugar especial en el infierno” para Trudeau.
Freeland evitó pronunciarse explícitamente sobre los ataques a Trudeau por parte de Trump y de Peter Navarro, pero agradeció a los parlamentarios de su país el respaldo unánime que dieron el lunes al primer ministro, un apoyo del que dejaron constancia en una moción aprobada en la Cámara de los Comunes.
“Estados Unidos tiene que quitar estas tarifas injustas e ilegales a Canadá y sus aliados”, instó Freeland.
La ministra calificó de absurdo que la administración de Trump acuda al argumento de que el acero y el aluminio canadienses suponen “una amenaza a la seguridad nacional” para la imposición de los aranceles.
Sobre la renegociación del TLCAN, que se ha complicado después de que todas las partes dieran señales en mayo de la posibilidad de llegar pronto un acuerdo, Freeland aseguró que Canadá considera importante seguir trabajando. Este jueves se reunirá en Washington con el representante de Comercio estadounidense para abordar el tema.
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Con información de DPA
MAP
