La Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (Conred) de Guatemala elevó a 116 la cifra de fallecidos por la erupción que registró el pasado 3 de junio el Volcán de Fuego, situado 50 kilómetros al oeste de la capital del país centroamericano.
Según la institución de protección civil, otras tres víctimas que habían sido dadas por desaparecidas fueron identificadas por el Instituto Nacional de Ciencias Forenses (Inacif), por lo que aumentó de 113 a 116 los muertos.
En su informe, la Conred detalla que aún suman 302 los desaparecidos por la potente erupción del coloso, ubicado entre los departamentos de Escuintla, Sacatepéquez y Chimaltenango.
Los afectados en comunidades de esos tres departamentos suman más de 1.71 millones de habitantes. La erupción destruyó 186 viviendas, una carretera, una escuela, dos puentes y dejó en riesgo otras 750 casas y con daños cinco tramos viales y una red de energía.
La erupción del volcán de Fuego en Guatemala, ocurrida a inicios de junio se encontraba en una de sus fases más complicadas: la que supone el rescate de las personas atrapadas bajo las cenizas, y en su caso, encontrar a quienes permanecen desparecidos.
Desde 1974 el volcán no había registrado una erupción como esta y cientos de imágenes ya recorren, y resumen, el espacio de la tragedia.
En la capital guatemalteca provocó el cierre del aeropuerto internacional La Aurora, lo cual afectó la salida de cuatro vuelos internacionales hacia Miami, México y Panamá.
Cuadrillas de la municipalidad capitalina salieron a las calles para limpiar las vialidades y avenidas que quedaron llenas del material lanzado por la erupción del volcán de Fuego, la más fuerte de los últimos años, de acuerdo con el Instituto Nacional de Sismología, Vulcanología, Meteorología e Hidrología (Insivumeh).
La actividad volcánica generó flujos piroclásticos fuertes que arrastró hacia las barrancas Seca, Cenizas, Onda, Las Lajas, Mineral y Taniluya.
Con información de EFE
HVI
