Tenemos miedo de que vuelva a volver a temblar”, admitió Felicitas González, habitante de San Gregorio Atlapulco, Xochimilco.
Para doña Felícitas y los diez integrantes de su familia, su casa, a la que se llega a través de angostos callejones, es ahora una trampa mortal.
Pos ya nomás estamos con el temor, no tenemos espacio para resguardarnos y vinieron unas personas y nos dijeron que todavía era habitable, pero pues no fue tan habitable porque se nos vino la barda encima”, afirmó.
Pero el riesgo que tienen en sus casas no es lo único que les preocupa, prácticamente todo San Gregorio tiene grietas en sus calles.
No tenemos un dictamen todavía, ninguno lo tiene, ha venido gente de Proteccion Civil, pero voluntarios nada más”, dijo Martín Cortés, vecino de San Gregorio Atlapulco.
Tras el sismo, los habitantes se percataron que había una grieta que comienza en la zona chinampera, cruza el pueblo y llega a sus casas.
¿Cree que estamos viviendo seguros así? No sabemos que vaya a pasar, afectó a todas las casas bardas, pisos y se sigue hasta más allá arriba, no sabemos hasta donde”, señaló Martín.
Para la mayoría de los habitantes de San Gregorio, la reconstrucción es lo que más preocupa.
Nosotros somos campesinos, las chinampas se partieron a la mitad, entonces ¿De dónde vamos a trabajar, de dónde vamos a encontrar para componer nuestra casita? Necesitamos mucho apoyo”, reconoció Catalina Pérez, vecina de San Gregorio Atlapulco, Xochimilco.
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Con información de Cecilia Reynoso
LHE
