CRIMEN Y SEGURIDAD

Sin pistas del paradero de “El Chueco”, presunto asesino de dos sacerdotes jesuitas en Chihuahua

Cientos de soldados del Ejército Mexicano, Guardia Nacional y policías del estado de Chihuahua, mantienen los operativos para ubicar y detener a Jose Noriel Portillo Gil, alias “El Chueco”, presunto asesino de los dos sacerdotes jesuitas Javier Campos y Joaquín Mora, además del guía de turistas Pedro Palma

  • También se mantiene la recompensa de 5 millones de pesos para quien de información del paradero del “Chueco”

Cientos de soldados del Ejército Mexicano, Guardia Nacional y policías del estado de Chihuahua, mantienen los operativos para ubicar y detener a Jose Noriel Portillo Gil, alias “El Chueco”, el presunto asesino de los dos sacerdotes jesuitas Javier Campos y Joaquín Mora, además del guía de turistas Pedro Palma.

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Detención de algunas personas involucradas con el crimen organizado

Según las autoridades estas acciones han permitido la detención de algunas personas involucradas con el crimen organizado, así como el decomiso de armas y vehículos, pero del asesino aún no hay pistas.

“Acordamos que iba a haber una sola línea de comunicación para informar esto… ha habido personas aseguradas, armas de fuego aseguradas, producto asegurado, drogas aseguradas, vehículos con reporte de robo asegurados y creo que ha ido avanzando y ha evolucionado bastante bien”, dijo Gilberto Loya, Secretario de Seguridad Pública del estado de Chihuahua

Tampoco hay pistas de los dos hermanos Paul y Armando, quienes fueron levantados por El Chueco el mismo día en que asesino a los sacerdotes y a Pedro Palma.

“De momento no, seguimos haciendo rastreos, ayer, un servidor personalmente estuvimos haciendo rastreos la información que teníamos en Sisoguichi y Panalachi, la verdad es que no pudimos dar con ellos, sin embargo, seguimos haciendo rastreos, incansables, para nosotros es prioridad”, detalló Gilberto Loya, secretario de Seguridad Pública del estado de Chihuahua.

En tanto continúa la exigencia de justicia de parte de la comunidad jesuita.

“Pues no solamente pedir justicia por estos padres, sino también pedir justicia por todos los que están desaparecidos, sabemos que son muchos y sabemos ya nos tocó solidarizarnos con aquellas familias que han perdido familiares… toda la comunidad sacerdotal estamos tristes, estamos consternados, con impotencia, pero, aun así, la esperanza y la fe de que la vida sigue y que esto va a cambiar, eso es lo que nos anima”, detalló Eduardo Silva, Sacerdote Jesuita en Cerocahui, Chihuahua

Las intervenciones de las autoridades en la sierra Tarahumara, se han extendido desde Guachochi hasta el fuerte Sinaloa y en otras comunidades de Sonora, pero sin resultados.

También se mantiene la recompensa de 5 millones de pesos para quien de información del paradero del “Chueco”.

Con información de Francisco Javier Carmona

HVI